Si un país puede hacerlo es Japón: Y ya lo está diseñando, un futuro sin combustibles

Publicado el: 2 de abril de 2025 a las 11:30
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Japon

Japón ya está diseñando el futuro, que llega sin combustibles para los automóviles. Pese a los continuos avances alcanzados en cuanto a eficiencia y reducción del consumo de combustible, el camino hacia la descarbonización todavía no se ha culminado. El sector del automotor batalla diariamente por instaurar piezas más sostenibles, como los coches movidos por electricidad o hidrógeno.

Sin embargo, ambas tecnologías aún presentan lagunas técnicas por solventar que impiden que los usuarios las vean a la misma altura que los coches de combustión. El camino hacia la descarbonización del transporte se está tornando complejo y cargado de desafíos, aunque no imposible. Los avances tecnológicos permiten vislumbrar un horizonte de esperanza hacia soluciones que jamás habíamos visto.



Algunos de estos atisbos de esperanza son la demanda de coches eléctricos, la adopción de procedimientos de producción verdes y las medidas impuestas por las autoridades. En este contexto, Japón es uno de los países más implicados en forma parte del cambio en el sector de la automoción. Un cambio que augura un futuro sin combustibles.

Japón traza el camino hacia un futuro sin combustibles

Bajo este marco, un grupo de investigadores japoneses del Okinava Institute of Science and Technology (OIST) ha mostrado ante el mundo un prototipo de sistema de levitación magnética para coches.



Aunque solo se trata de una propuesta de prototipo, sirve para exponer una idea que podría suponer una auténtica revolución en la industria. De llegar a desarrollarse y escalar, esta tecnología podrá acotar de forma drástica el consumo energético de los vehículos al descartar la fricción.

No obstante, para llegar a esa instancia, aún debe solventar un gran número de retos. Este sistema de Japón utiliza materiales diamagnéticos, como el grafito, junto a potentes imanes para hacer levitar vehículos sobre pistas especializadas.

Necesita energía solo al principio, para producir el campo magnético, pero no durante el movimiento. La comentada fricción superficial queda suprimida, lo que impulsa la eficiencia energética y baja el consumo de recursos del vehículo.

Sumado a esto, el desgaste mecánico también se torna menor, al dejar fuera las vibraciones, pequeños daños a los materiales por los coches, etc. Una idea completamente revolucionaria que se suma al objetivo de Japón de jubilar los coches eléctricos de Europa.

Retos pendientes para la nueva propuesta de Japón

El prototipo de motocicleta eléctrica que Japón mostró ante el mundo todavía es una pieza pequeña y difícil de escalar. Adicionalmente, está la enorme complejidad de instaurar una infraestructura especializada para la tecnología que plantea. Sin pistas magnéticas, no podríamos disfrutar de coches que levitan.

Otro punto a considerar es que sus costes de implementación serían muy elevados y la amortiguación de vórtices supone una pérdida de energía. Esto último referencia a los discretos remolinos de aire formados alrededor del vehículo y lo van ralentizando, algo que debería quedar resuelto para evitar que el coche pierda altura o estabilidad.

¿Lo que propone Japón podría llevarse a cabo hoy?

La realidad actual es que la propuesta de Japón aún se trata de una tecnología experimental, en sus fases más tempranas. No existen planes concretos registrados para que se implemente a nivel comercial. La transición eléctrica ya está siendo un desafío, por lo que la transición magnética lo sería todavía más debido a la infraestructura que necesitaríamos para implantarla.

Japón tiene la mira puesta en un futuro sin combustibles a base de una tecnología fascinante que, por ahora, es más una ilusión que una realidad, aunque eso podría cambiar con el paso del tiempo. Mientras esto se define, este motor de plasma impulsa un coche japonés. Aseguran que desafía la lógica y no debería existir.