El hidrógeno podría tener sus días contados con la llegada de un motor con agua. Una hazaña que todavía no ha conseguido ni el mismísimo motor de aire comprimido. La búsqueda de nuevos combustibles para reemplazar a los combustibles fósiles sigue vigente, razón por la que ya se está contemplando la posibilidad de optar por la electrificación y el hidrógeno.
Europa y otras zonas del mundo están poniendo presión para que los motores de combustión interna queden fuera del mercado, dejando paso a la electrificación del transporte. Sin embargo, este tipo de movilidad todavía se enfrenta a numerosos desafíos, como la escasa infraestructura de recarga pública o la duración y el coste de las baterías.
Aunque un gran número de compañías ya han optado por la tecnología eléctrico, hay quienes siguen creyendo que los modelos de combustión podrían tener una segunda oportunidad. Asimismo, ven el hidrógeno como una alternativa viable.
Toyota trae un motor que puede acabar con el hidrógeno
Bajo estas circunstancias, ha aparecido una solicitud de patente presentada por Toyota en Estados Unidos. Su propuesta se basa en el uso de válvulas inyección de agua para refrigerar las altas temperaturas producidas por gases como el hidrógeno. Estamos ante un motor revolucionario que tiene el potencial suficiente para jubilar a la gasolina. Utiliza hidrógeno y se refrigera con agua. Por lo tanto, dejaría a un lado el uso del hidrógeno tal y como lo concebimos hoy.
La empresa japonesa permanece firme con los coches híbridos frente a los eléctricos puros. Asimismo, es uno de los fabricantes más decididos en la investigación acerca del hidrógeno y sus posibles aplicaciones. De hecho, desde hace años cuenta con el mercado de Toyota Mirai, que solo expulsa vapor de agua y ha tenido un éxito arrollador en Japón.
Sigue siendo un coche eléctrico con una pila de combustible de hidrógeno, mientras que la nueva patente propone un auténtico cambio de paradigma. Hace un largo tiempo que Toyota opta por nuevos motores de hidrógeno. Uno de ellos llegó en 2021 con un vehículo de carreras inspirado en el modelo Corolla Sport, y al igual que sucede con Mirai, era un automóvil eléctrico de pila de combustible.
Funcionamiento del nuevo motor con agua: el hidrógeno es historia
Lo más novedoso de la patente de Toyota es su sistema de refrigeración. Respecto a los motores convencionales, la evaporación latente de la gasolina o el diésel ayuda a que se produzca el enfriamiento de los cilindros. En cambio, los motores de combustión de hidrógeno producen una temperatura tan alta que puede ocasionar combustiones irregulares, necesitando de métodos específicos para enfriarlos.
El nuevo diseño de la marca nipona funciona inyectando agua mediante válvulas de inyección dedicadas a enfriar el motor de la manera más eficiente y rápida posible. Utiliza dos válvulas de inyección de agua en cada cilindro, cada una con la responsabilidad de ingresar el líquido refrigerante en los diferentes orificios de admisión, además de puertos de apertura y cierre para una correcta gestión del flujo del líquido.
El agua podría inyectarse cuando en los momentos de apertura y cierre de la válvula de admisión. Esto quiere decir que no se rociará constantemente. Si el agua accede al cilindro, no existirán problemas si las gotas son lo bastante pequeños, dado que se evaporarán casi al instante a causa del calor y la presión interna.
Pronóstico del motor que jubila al hidrógeno
Todavía queda un largo camino para ver el motor de agua en un modelo funcional. Sin embargo, el solo hecho de que haya aparecido en la escena automovilística muestra la apuesta del mercado por diversificar las opciones para los conductores más allá de los coches eléctricos puros (como el exitoso modelo de Xiaomi que llegará muy pronto a España).



















