La industria automotriz, cada día avanza más rápido. Luego de que Francia nos impactara diciendo adiós al hidrógeno, ahora ha llegado un nuevo motor que promete ser el futuro ¿Será este el fin de los coches eléctricos y de hidrógeno?
Los combustibles del futuro
Actualmente, la industria automotriz avanza a toda velocidad hacia una movilidad ecológica, ofreciendo un mar de alternativas a sus compradores, pero aún así, hay una polémica gigante sobre cuál es realmente el combustible futuro.
Muchas personas siguen eligiendo motores tradicionales de diésel o gasolina, mientras que otras prefieren coches con electricidad o hidrógeno, pero ahora ha llegado una opción muy diferente, ¿De qué se trata?
La respuesta sorprendentemente sería de nitrógeno. Increíblemente, universidades como la de Washington están trabajando en prototipos, explorando su viabilidad como una alternativa verde a los combustibles fósiles.
Una idea del siglo XX
La idea de utilizar nitrógeno en motores inició en el siglo XX, cuando científicos e ingenieros comenzaron a investigar sustancias a temperaturas extremadamente bajas para la industria aeroespacial.
Su producción se realiza mediante un procedimiento sencillo, pues solo es necesario enfriar el aire hasta 196 grados bajo cero. Así, el oxígeno se separa del resto de los gases y luego se para encapsula para disminuir al mínimo las pérdidas por evaporación.
Un avance que cambiaría el futuro
La empresa británica Dearman ha hecho algo impresionante usando motores de nitrógeno líquido en el transporte. Sainsbury’s fue su principal socio puso esta tecnología a su flota de unidades logrando enormes disminuciones en las emisiones de carbono.
Lo más impresionante, fue que en los primeros meses de uso, fue posible reducir ¡1.6 toneladas de emisiones de dióxido de carbono! ¡Realmente impresionante! Este increíble logro fue una gran prueba de que el nitrógeno líquido es bueno para enfriar sin dañar al planeta.
Además, el nitrógeno líquido, ofrece ventajas en aplicaciones industriales y de transporte debido a su capacidad de enfriamiento, su seguridad como gas inerte y su facilidad de almacenamiento en estado líquido. Y a diferencia del hidrógeno que requiere condiciones de manejo especiales para no explotar, el nitrógeno es útil en muchas aplicaciones.
El motor de nitrógeno puede ser el futuro
Para 2050, Europa espera que un alto porcentaje de los vehículos en circulación cuenten con emisiones mínimas o nulas de dióxido de carbono. Este objetivo sin duda, podría lograrse con el impulso de tecnologías como el hidrógeno y el nitrógeno líquido.
Aunque los costos actuales para usar motores de nitrógeno líquido son bastante altos, esta tecnología ha demostrado su efectividad en aplicaciones especializadas y en el transporte comercial, donde su capacidad de enfriamiento y bajo impacto ambiental lo posicionan como una opción sostenible a largo plazo, por lo tanto es una opción que sin duda vale la pena.
¿Será este el fin de los coches eléctricos?
Estas iniciativas sin duda despiertan el interés en la competencia, pues la llegada de esta novedosa tecnología podría cambiar drásticamente la demanda de coches eléctricos o incluso los de hidrógeno y causar una guerra comercial.
Sin embargo, tenemos que recordar que la industria de coches eléctricos también está esforzándose constantemente para crear nuevas tecnologías, aunque igualmente si se llegan a comercializar coches de nitrógeno, esto tendrá un gran impacto en el mercado.
Esta situación podría ser ventajosa, ya que más competencia suele mover los precios del mercado, y además, ¡nuevos motores ecológicos impulsan un mercado más verde!
En conclusión, el motor de nitrógeno ha demostrado ser una tecnología innovadora y eficiente al igual que la primera moto con este combustible. Estos avances, son un gran paso para la movilidad sostenible, pero poco a poco podrían dejar en el pasado a los coches eléctricos.