Suecia imagina ya un futuro sin hidrógeno con la llegada de un motor gigantesco que expulsa vapor. Sorprende tanto como el motor más potente del mundo con forma de dónut. El cambio climático es uno de los mayores retos del momento actual. En este contexto, un reconocido grupo dedicado a la fabricación de automóviles está firmemente compromiso con los objetivos dispuestos en el Acuerdo de París.
Además, busca liderar la industria en la transformación hacia cero emisiones netas de gases de efecto invernadero para 2040. Este es un gran desafío para esta compañía de Suecia y para el mundo general. Una de las acciones más importantes que se pueden llevar a cabo es reducir las emisiones contaminantes de sus clientes.
Esto solo puede lograrse con el desarrollo de productos y soluciones que disminuyan la huella de CO2. Siguiendo esta premisa, ha fijado objetivos ambiciosos e innovadores que incluyen la instauración de un motor gigantesco que expulsa vapor.
Suecia cambia su tecnología de hidrógeno: planea liderar la industria con una nueva estrategia
Volvo Trucks, una división de fabricación de camiones de Volvo con sede en Gotemburgo (Suecia), ha anunciado la elaboración de camiones equipados con motores de combustión interna que funcionan con hidrógeno. Es decir, en lugar de utilizar pilas de combustible para el uso de hidrógeno deciden emplear el “combustible del futuro” en motores de combustión.
Una medida con la que se despiden de la tecnología de hidrógeno tal y como la conocíamos, abrazando un nuevo concepto. Aunque ambos usan hidrógeno como fuente de energía, hay claras diferencias entre ambas tecnologías.
Una de las ventajas de recurrir a un motor de combustión interna es que es posible aprovechar un motor diésel de 6 cilindros que ya existe, pero con algunas modificaciones. Esto supone un ahorro para la empresa. Los motores emplearán un nuevo sistema de inyección directa de muy alta presión.
Esta tecnología inyecta una pequeña cantidad de combustible de ignición a alta presión para permitir la ignición por compresión antes de aplicar hidrógeno. Así se alcanza una mayor eficiencia energética con menor consumo de combustible y un incremento de la potencia del motor.
El motor de combustión va situado en su ubicación habitual, mientras que los depósitos de hidrógeno quedaron repartidos en varias localizaciones: dos depósitos en los laterales, espacios donde normalmente va el depósito de combustible diésel, y tres depósitos más detrás de la cabina.
Además, partiendo de un motor diésel existente, el proceso es más barato que los que recurren a pilas de combustible, con un precio más caro de fabricación.
Suecia se prepara para recibir la nueva era del hidrógeno con este motor gigantesco
Las primeras pruebas en carretera de estos vehículos cero emisiones de CO2 darán comienzo en 2026 y el lanzamiento al mercado de su camión de hidrógeno está programado para finales de esta década.
Aunque parecen fechas lejanas, el tiempo apremia, por lo que la empresa de Suecia ya está trabajando en las pruebas de laboratorio. Volvo ha firmado una alianza con Westport Fuel Systems, que será el proveedor de la nueva tecnología de inyección y con quien creará una empresa conjunta que comenzará su operación en el segundo trimestre de 2024.
La compañía de Suecia acuña que sus camiones de hidrógeno tendrán el mismo rendimiento y fiabilidad que los camiones diésel.
“Los camiones en los que se mantiene el motor de combustión interna tradicional, pero que funcionan con hidrógeno, ofrecerán el mismo rendimiento y fiabilidad que nuestros camiones diésel, pero con la ventaja adicional de potencialmente tener cero emisiones netas de CO2. Serán un valioso aporte a nuestra gama de camiones eléctricos de batería, que llevan varios años en el mercado”, aclara Jan Hjelmgren, jefe de Gestión y calidad de productos de Volvo Trucks, según registra la web de la empresa.
Suecia imagina ya un futuro diferente con este motor gigantesco que expulsa vapor. Mientras la meta de Volvo Trucks se acerca, la alemana BMW acaba de lograr algo inédito.