Tesla comienza el 2025 con buen pie en el mercado europeo. Pero no porque haya incrementado la venta de sus coches eléctricos, sino porque las marcas tradicionales podrían correr tras su ayuda. Este año comienza a aplicarse la normativa que regula las emisiones contaminantes a los fabricantes de automóviles que vendan coches en Europa.
Es evidente que el límite de emisiones no se ha alcanzado para que Toyota, Stellantis, Ford, Mazda y Subaru puedan preferir comprarle a Tesla sus derechos de emisiones, que registra una media igual a cero, en lugar de pagar el “multazo” a Bruselas.
La tendencia del 2025 es pagarle a Tesla
El nuevo sistema (CAFE) establece que las emisiones medias por marca deben estar por debajo de los 93,6 gramos por kilómetro de CO2. Los fabricantes que estén por encima de esta cifra deberán pagar una multa de 95 euros por gramo excedido y por coche vendido. Tomando en cuenta todos los fabricantes, la cifra podría ascender a 15.000 millones de euros sólo en 2025.
Las marcas que estén por debajo de los 93,6 gramos no pagarán las sanciones, algo que favoreció a Tesla. Otra opción para quienes no cumplan con la normativa, es comprar derechos de emisiones a las marcas que están por debajo del límite.
Otra realidad que favorece a Tesla y a las marcas que saben que serían multadas, pues pagarle a Elon Musk les resulta más económico que a Bruselas: alrededor de 1000 millones de dólares. No es la primera vez que Tesla sale ganando de cara a la normativa de CAFE: por este concepto, la marca recibió 1.800 millones de dólares en 2023. Y tomó el mercado en 2024 con estos números
Mercedes se apoyará en sus socios chinos
Mercedes Benz se encuentra en las marcas que para este año cuenta con un registro importante en emisiones. Pero, a diferencia de las marcas que podrían pagarle a Tesla (Toyota, Stellantis, Ford, Mazda y Subaru), Benz se decantó por apoyarse en sus socios chinos de Geely para comprar los créditos de emisiones que le puedan hacer falta.
Se ha reseñado que Mercedes cerró el año pasado con una media de 108 gramos por km, una cifra muy cercana al límite y la cual le permite comprar derechos a emisiones más económicos que, quizás, los derechos de Tesla. Aun así, es muy probable, dado su desempeño, que se concentre este año en cumplir con el objetivo de reducción.
Según datos de Stuttgart, Volkswagen cerró el 2024 en una media de 123 g/km; mientras que Ford cerró en 125 g/km, Stellantis con 113 g /km, Renault-Nissan-Mitsubishi en 114 g/km y Hyundai Motor Group en 108 g/km.
Comunicado a la Comisión Europea
Stellantis, Toyota, Ford, Mazda y Subaru han expresado a la Comisión Europea la intención de formar una alianza encabezada por Tesla. La idea es que las emisiones de sus vehículos en 2025 se contabilicen en conjunto y no individual.
Con la alianza, los fabricantes tradicionales evitarían sanciones millonarias por parte de Bruselas. Con esto, también barajan la posibilidad de reducir la fabricación de vehículos de combustión, que en algunos países representa un porcentaje alto de producción, como en España, que ocupa un 91% del mercado automotriz.
Se espera que en los próximos días haya una respuesta que podría no sólo favorecer la demanda de vehículos eléctricos o coches enchufables, sino que también la neutralización de las emisiones de CO2. Las fuentes nos indican que CAFE busca con esta medida prohibir la venta de vehículos de combustión gasolina y diésel en 2025, tal como ya lo ha hecho este país desde el 1 de enero de este año, mientras que para el 2050 esperaría sacar del mercado estos coches.