Ante la creciente competencia en el mercado eléctrico, Tesla saca la luz el “proyecto Redwood” y sentencia para siempre al hidrógeno con su nuevo coche del futuro. En la carrera por la descarbonización del transporte, el vehículo 100% eléctrico es la alternativa más eficiente, al menos hasta ahora. Aunque la transición energética alcanza a la industria en general, existe una mayor insistencia con el transporte porque es responsable de cerca de la mitad de la contaminación ocasionada en las ciudades.
La incursión de la movilidad eléctrica ofrece una mejora en la calidad del aire, ya que los vehículos de esta categoría no utilizan ningún tipo de combustible fósil y, por tanto, no emiten gases de efecto invernadero. Tanto el vehículo ligero, como los autobuses o los caminos pueden pasarse a la electrificación. La electricidad parece ser la solución definitiva para reemplazar a los combustibles fósiles, pero no es la única alternativa que se estudia en la actualidad.
El hidrógeno también tiene un público amplio que considera que el futuro llevará su nombre. En este contexto, Tesla desplaza esta segunda opción y potencia la primera con el “proyecto Redwood”.
Tesla lanzará un nuevo coche en 2025
Elon Musk está preparando su llegada al segmento de los crossover con un vehículo eléctrico de nueva generación. Según registra Reuters, la empresa estadounidense ya ha comentado ante sus proveedores que desea iniciar la producción de un nuevo vehículo eléctrico para incorporar en el mercado masivo bajo un nombre en código “Redwood” a mediados de 2025. Fueron cuatro personas anónimas familiarizadas con el tema las que dieron testimonio. De hecho, dos de ellos hablaron sobre un modelo crossover compacto.
El director ejecutivo de Tesla, Elon Musk, confirmó durante una conferencia telefónica que la empresa quiere comenzar con la creación de su vehículo eléctrico de próxima generación en su fábrica de Texas en el segundo semestre de 2025. A este territorio le seguirá México y otra fábrica ubicada fuera de América del Norte, que terminará de decidirse a finales del año que viene. Además, expresó que incrementar la producción de esta nueva pieza será un importante reto para la compañía.
Tesla mandó “solicitudes de cotización” o invitaciones a licitar para el modelo “Redwood” a los proveedores en 2023 y auguró un volumen de producción semanal de 10.000 vehículos. La producción se haría efectiva en junio de 2025.
La arquitectura de Tesla de próxima generación ha sido apodada “NV9X” de forma interna, incluyendo dos o más modelos. Asimismo, Tesla tiene en mente la construcción de automóviles más asequibles en su fábrica cerca de Berlín y tiene interés en desarrollar una fábrica de India para crear automóviles eléctricos menos costosos. Cabe destacar que el fabricante también cuenta con fábricas en Shanghái y Fremont, California.
Tesla busca expandir sus horizontes con vehículos de 25.000 dólares
Hace un largo tiempo que Musk ha suscitado el interés de los inversores por vehículos eléctricos económicos y robotaxis autónomos, cuya estimación es que se fabriquen en plataformas de vehículos eléctricos más asequibles de próxima generación. Esas piezas, incluida la básica de 25.000 dólares, harían posible que compitiera con otros automóviles más económicos que utilizan gasolina e incluso otros eléctricos, como los modelos de la china BYD.
El pasado mes de mayo, Musk señaló que Tesla trabajaba en dos nuevos proyectos, con un potencial de ventas combinadas de 5 millones de vehículos anuales. “Tanto el diseño de los productos como las técnicas de fabricación están muy por encima de cualquier otra cosa que esté presente en la industria”, sostuvo dijo en la reunión anual de accionistas de la compañía.
En definitiva, Tesla prepara el “proyecto Redwood”, con el que pretende revolucionar el sector sobrepasando la última hazaña de Volkswagen.