Tras exponerse el futuro de dos ruedas que se imagina BMW, Valencia crea el Santo Grial de las dos ruedas. La movilidad está cambiando en todo el mundo y, aunque la mayoría hable de los coches electrificados, el transporte se extiende mucho más allá. De hecho, las unidades de dos ruedas están progresando cada día y mucho más rápido de lo que muchos se imaginan.
En este caso, nos centraremos en el uso de la bicicleta. Se torna el medio de transporte urbano más saludable, económico y respetuoso con el medio ambiente. Estos rasgos distintivos están logrando que cada vez sean más las personas que se animan a usarla y hacer rutas cicloturistas y de montaña. Además, es una actividad propicia para ejercitarse mientras se va de camino al trabajo o centro académico.
No obstante, el uso habitual de las bicicletas tiene ligado un problema que los usuarios prefieren evitar cuando se van a encontrar con otras personas: el sudor. Nadie quiere llegar empapado a la oficina o la universidad. Por este motivo, las bicicletas eléctricas están aumentando su popularidad. Permiten recorrer la misma distancia sin apenas esfuerzo.
Valencia crea un invento de dos ruedas que destierra a la bicicleta eléctrica
Hasta aquí parece el transporte perfecto, pero entraña otro problema: su alto precio inicial. En ese sentido, ya hay empresas trabajando en sistemas que permitan convertir una bicicleta normal en una eléctrica sin necesidad de disponer de conocimientos mecánicos. Así es como llega hasta nuestros días Spiny, el dispositivo valenciano que transforma una bici normal en eléctrica en 5 segundos.
Es un dispositivo de apenas 2,2 kilos y tiene la capacidad de hacer una conversión increíble en las bicicletas. Con “un solo clic” pasan a ser eléctricas con una instalación que duran 10 minutos. Su creador, Marco Cocchiarella, explicó ante EFE que, junto a Maxi Gross e Iván Docampo, fundaron crearon la empresa Spiny en 2020.
Tiene sede en Alicante y Valencia, donde están incorporados en la aceleradora Lanzadera, del reconocido empresario Juan Roig. Cocchiarella, originario de Rosario (Argentina), señala que Spiny es el “kit más liviano del mercado”. Además, puede instalarse y utilizarse cuando el usuario así lo decida y retirarse para recargarlo o evitar posibles robos.
“Lo importante es que no pierdes tu bici. Lo instalas en ella y la conviertes en eléctrica”, revela destaca Cocchiarella. En este contexto, recordó que existen 38 millones de personas que usan bicicleta en el continente europeo. El proyecto comenzó con la mira puesta en ayudar a los amantes de la bicicleta a convertir sus unidades.
Antes de llegar al formato final, ejecutaron diversas pruebas y entrevistas hasta que llegaron a la conclusión de que “había mucha gente que realmente lo necesitaba”. “En mi familia ya lo había visto, pero descubrimos que había mucha gente que no quería usar la bici por no hacer tanto esfuerzo o por cualquier otra razón; había realmente una necesidad de hacer fácil el ir en este transporte”, aportó.
Valencia tiene la bicicleta del futuro: no sudarás y no te la robarán
Una de las características más llamativas del dispositivo de Valencia es su fácil adaptación. “Con solo dos tornillos que dejan la parte fija acoplada a la bici, pones y quitas el dispositivo fácilmente”, explicó el experto. En 2023 sacaron su versión anterior y en 2024 apareció su formato renovado en Berlín (Alemania) y España.
Está disponible online en el marketplace de Decathlon, además de otros distribuidores. “Hemos vendido en Italia, Alemania y España y ahora acabamos de hacer una venta grande en Turquía”, matizó. El objetivo ahora es llevar su invento a Latinoamérica, donde ya han comenzado las primeras ventas.
Valencia crea el Santo Grial de las dos ruedas que promete hacer historia. Mientras termina de instaurarse en el mundo, los apasionados por las dos ruedas caen rendidos ante esta bicicleta eléctrica disponible por menos de 500 euros.



















