Los bonobos, aún son un misterio para la ciencia. Sabemos que son muy inteligentes porque usan herramientas, cooperan para ayudarse, mantienen relaciones intensas y viven en sociedades donde la alianza entre hembras las convierte en poderosas. Pero quizá lo más intrigante y apasionante es su intensa vida emocional.
Para los animales que vivimos en sociedad, la detección rápida del estado emocional de aquellos que nos rodean para responder de manera adecuada resulta fundamental. Si existe cohesión y lazos estrechos entre los miembros, las probabilidades de supervivencia de cualquier grupo aumentan. Esto es tan cierto para una comunidad de chimpancés como lo es para una organización moderna.
Conocer cómo se sienten los demás es de gran ayuda para adaptarnos. Esto es de gran importancia para los primates como nosotros, y también otros mamíferos como los cetáceos, algunas aves o los elefantes, los cuales vivimos en comunidades donde hacemos amistades y creamos relaciones de larga duración, incluso para toda la vida.
Un estudio concluye que los bonobos son capaces de comunicarse con humanos y trabajar en equipo
Intuir la ignorancia de otro es una capacidad que se creía humana, pero un nuevo estudio presenta pruebas en contra. Los humanos compartimos con los bonobos algo más del 98% del código genético, así que no parecería extraño que tengamos comportamientos en común. Esto puede llevar a preguntarnos, si son, junto a los chimpancés, los primates ‘más inteligentes’.
La inteligencia no es una cuestión de cantidad, sino de calidad y saber para qué. «Realmente cada uno de nosotros tiene unas características que le hace estar más adaptado, ser más adecuado para desarrollar ciertas actividades en cada uno de nuestros ambientes. Yo creo que hablar de más o menos inteligente… o que tiene mayor o menor capacidad, no sería adecuado sin saber el contexto», matiza la bióloga Ana Fidalgo, etóloga y presidenta de la Asociación Primatológica de España.
Los ‘increíbles’ bonobos
Gracias a los experimentos que ha realizado el centro de conservación de simios Ape Initiative de Iowa, en Estados Unidos, ahora sabemos que los bonobos tendrían la capacidad de identificar la ignorancia en otros individuos. En concreto, si ese individuo sabe dónde se encuentra, o no, un determinado objeto.
Los investigadores Luke Townrow y Christopher Krupenye ,el autor principal del estudio, han tomado a tres bonobos de diversas edades: Nyota (25), Kanzi (43) y Teco (13).
Realizaron el experimento en varias fases, para que primero los primates se familiarizaran con los materiales utilizados, tres vasos y una uva a modo de recompensa. Una vez que los bonobos entendieron que la fruta se la entregaría uno de los humanos, tras formular la pregunta.
¿Dónde está la uva?
Probaron a colocar la uva bajo el vaso con Chrisopher Krupenye viendo el proceso en el primer caso y sin verlo en el segundo caso. Al hacerlo, comprobaron que los bonobos, en este último caso, señalaban enérgicamente dónde se encontraba la uva, al ver que Krupenye no lo sabía.
Sobre el experimento, la experta aclara que «no es una característica que se haya demostrado única en los bonobos, aunque haya sido uno de los últimos experimentos hechos. Pero bueno, son capaces de tomar decisiones, de planificar, de realizar estrategias […] facilita las relaciones sociales y el buen comportamiento del grupo en general, así como el beneficio de todos y cada uno de ellos«. La comunicación y la comprensión —agrega la experta— facilita la resolución de conflictos en cualquier comunidad, bien sea entre personas o entre los bonobos.