La custodia de un territorio consiste en la aplicación de un conjunto de estrategias y técnicas encaminadas a preservar los valores naturales, culturales y paisajísticos del territorio, así como la verificación de que en el mismo se lleva a cabo un uso responsable y no se afecta a la biodiversidad.
Un acuerdo de custodia es un procedimiento voluntario entre un propietario y una entidad de custodia para pactar el modo de conservar y gestionar un territorio con el fin de que este se mantenga a salvo de acciones externas. El pacto puede ser verbal o escrito.
Las entidades de custodia son organizaciones públicas o privadas sin ánimo de lucro que participan activamente en la conservación del territorio mediante las técnicas de custodia del territorio. Pueden actuar de entidad de custodia organizaciones tan diversas como una asociación de vecinos, una organización conservacionista, una fundación, un ayuntamiento, un consorcio y otro tipo de ente público.
Protegiendo los territorios y la biodiversidad
El Gobierno regional, a través de la Consejería de Desarrollo Sostenible, “va a impulsar la custodia del territorio como herramienta de conservación de la biodiversidad y participación ciudadana, prestando atención a la dimensión social de estas iniciativas y su potencial contribución a la lucha contra la despoblación”.
Así lo ha destacado la directora general de Medio Natural y Biodiversidad, Susana Jara, durante la Jornada de Custodia del Territorio celebrada en la Consejería, donde ha conocido de primera mano las iniciativas que están llevando a cabo las entidades interesadas.
Las mismas “están trabajando o tienen intención de hacerlo en los próximos años en nuestra región a quienes hemos trasladado la necesidad de seguir impulsando la colaboración público-privada y social para la conservación y la restauración de la naturaleza, en el marco de la Estrategia Europa de Biodiversidad 2030”.
Como ha explicado, “la custodia del territorio se constituye como una herramienta de conservación de la naturaleza que fomenta acuerdos voluntarios entre propietarios y entidades sin ánimo de lucro para la mejora de los valores naturales y culturales de un entorno, y queremos utilizar este mecanismo de gestión para la coordinación y organización de las medidas compensatorias asociadas a los proyectos de implantación de energías renovables en la región”.
La representante del Ejecutivo autonómico ha señalado que “un ejemplo de éxito de este modelo de colaboración lo encontramos en el Programa de Medidas Agronómicas Compensatorias dentro del denominado ‘nudo Beta’ en Cuenca, donde se ha firmado un contrato de custodia del territorio con la fundación ‘Global Nature’ que cuenta con 1.570 hectáreas en medidas agroambientales.
Esto se hace como compensación a la ocupación de hábitats esteparios por parte de 18 plantas solares fotovoltaicas desarrolladas por seis promotores en cuatro términos municipales de la provincia (Barajas de Melo, Belinchón, Huelves y Zarza de Tajo)”. Ha concluido Jara destacando que “la jornada ha sido muy exitosa, ya que ha contado con una participación de 19 entidades y 85 participantes”.