De todos es sabido los peligros que tienen aquellos medicamentos que se toman sin receta y sin la prescripción de un médico y en el caso de Ozempic no iba a ser menos. Un tratamiento que se ha hecho viral al que muchos recurren por motu propio en caso de obesidad para adelgazar.
El principal compuesto de este fármaco es la semaglutida, que puede tener efectos secundarios graves y sobre todo si se toma sin un control por parte de un médico o profesional de la salud.
Un fármaco que muchos consideran milagroso para bajar peso; algo que solo se puede hacer si se acompaña de una buena alimentación y de la práctica de ejercicio físico de manera regular.
Cuidado con tomar Ozempic a la ligera
Los peligros del Ozempic sin prescripción médica. La semaglutida puede tener efectos secundarios graves y solo debe tomarse con supervisión médica ya que el tratamiento no es mágico y debe ir acompañado de ejercicio y una alimentación saludable.
Pilar es diabética y una de las muchas personas que toma Ozempic en España. Su adhesión a este tratamiento llegó por indicación médica, en concreto de su endocrinóloga, ya que padecía diabetes y algo de sobrepeso.
Había probado otras opciones terapéuticas, pero al final el fármaco Ozempic, cuyo principio activo es la semaglutida, fue la terapia adecuada en su caso, al menos por el momento. «He adelgazado 20 kilos», ha declarado a los micrófonos de TVE. Cada tres o cuatro meses le realizan controles, pero no todo el que busca este medicamento, u otros similares, está en su situación.
De hecho, hace unos meses los medios de comunicación se hicieron eco de la denuncia de la Agencia Española del Medicamento por la venta sin receta de este fármaco, así como por el desabastecimiento que estaban sufriendo algunas farmacias, propiciado por la alta demanda del mismo como adelgazante.
El perfil de usuario de este fármaco es el de adultos de entre 30 y 40 años, sin padecer diabetes ni signos evidentes de sobrepeso, ha señalado la farmacéutica Fátima Aguado.
Efectos secundarios del tratamiento
El Ozempic es una de las terapias revolucionarias contra la diabetes, y otras enfermedades metabólicas, que facilita la pérdida rápida de peso, pero es un fármaco y no está exento de riesgos. Solo hay que leer el prospecto para comprobar que el medicamento puede causar efectos secundarios en más del 10% de los usuarios, como náuseas, mareos e hipoglucemias.
También otros más graves, aunque enmarcados dentro de los efectos indeseados poco frecuentes, como la pancreatitis, la enfermedad ocular diabética (retinopatía) y reacciones alérgicas graves, entre otros.
En los últimos años, el consumo de semaglutida —principio activo del Ozempic— se ha disparado. «Este fármaco es una herramienta y si se utiliza mal, puede generar muchos efectos secundarios, como déficits nutricionales», ha subrayado la doctora especialista en endocrinología, Laura Bartomé. Además, ha señalado que no todos los pacientes responden igual.
Por ello, advierte que la obesidad no se autodiagnostica y no depende solo del peso que marque la báscula. «Tiene que ver con el IMC, cómo está distribuido, el porcentaje de grasa, de músculo, dónde está esa grasa y qué implicaciones metabólicas tiene«, ha explicado la endocrinóloga. Los expertos insisten en que el tratamiento no es mágico y que tiene que ir acompañado de una alimentación equilibrada y de ejercicio físico. El objetivo es usarlo, con seguimiento médico, para implantar una vida saludable. ECOticias.com