La humanidad está cada vez más preocupada por su propia existencia debido al avance del cambio climático. Ante este escenario, ha surgido una combinación que nadie imaginaba beneficiosa y que podría ser nuestra salvación.
Actualmente, la Tierra está marcado por fuertes desafíos ambientales. En este punto, la energía solar se ensalza como una fuente energética esperanzadora. Los dispositivos utilizados para explotarla, paneles solares, albergan la capacidad de convertir la radiación solar en electricidad limpia y renovable. Con este rasgo, juegan un papel vital en la transición hacia un futuro más sostenible.
Estos dispositivos no solo permiten que la humanidad cree energía renovable. También permiten proteger la Tierra, acotando las emisiones de gases de efecto invernadero. Cumplen dos funciones: atesorar recursos naturales y fomentar la independencia energética.
Aunque parezca impensado, la humanidad podría salvarse con esta combinación
La difusión de gases contaminantes desprendidos en fuentes fósiles es uno de los grandes problemas de la sociedad. Sus efectos adversos no quedan limitados al medioambiente. También provocan un impacto considerable en la salud del ser humano.
La exposición recurrente a la contaminación del aire, el agua y suelo pueden derivar en enfermedades y trastornos que perjudican la calidad de vida de la humanidad. Es ahí donde la combinación que vamos a exponer toma sentido.
Y mucho más después de exponerse lo que ha sucedido con los paneles solares carnívoros. La combinación de agricultura y paneles solares está construyendo el futuro energético al que aspiramos desde hace tiempo.
Un nuevo estudio de la Universidad Estatal de Colorado y la Universidad de Cornell pone de manifiesto que la presencia de paneles solares en los pastizales de Colorado podría disminuir el estrés hídrico, mejorar los niveles de humedad del suelo y, durante años secos, impulsar el crecimiento de las plantas alrededor del 20% o más si lo comparamos con campos abiertos.
Paneles solares y agricultura, la combinación que la humanidad necesitaba descubrir
Los descubrimientos del estudio fueron publicados en Environmental Research Letters. El artículo hace una descripción sobre las posibles ventajas y retos de la implementación de sistemas fotovoltaicos en ecosistemas de pastizales.
Los datos tomados toman una especial relevancia, considerando la sequía existente en las zonas áridas del oeste y el posible cambio climático que se avecine de cara al futuro. Aunque los sistemas de energía solar son, en parte, la salvación de la humanidad, tienen un aspecto negativo para la agricultura.
Acotan la cantidad de luz solar disponible para el crecimiento vegetal, algo que podría perjudicar a los ecosistemas complejos, disminuyendo la vida silvestre, el carbono que almacena y el forraje que se origina para el pastoreo de ganado.
El informe está basado en cuatro años de investigación sobre una instalación solar agrovoltaica en Longmont, Colorado. Supone el primer paso para analizar en campo cómo la explotación conjunta de energía solar y pastizales altera dicha dinámica.
La humanidad tiene por delante una nueva oportunidad: esta combinación cambia el panorama
Las plantas debajo y alrededor de los paneles solares disfrutaron de un sombreado parcial y agua adicional acumulada en los dispositivos. Este panorama loas ayudó a sobrevivir en los complejos meses de verano.
Durante un año seco, el crecimiento de la hierba del lado este de los paneles fue hasta un 90% más productivo en algunas instancias. En los años húmedos y condiciones normales, la respuesta positiva en la generación de hierba bajó.
No obstante, el lado este de los paneles continuó con una mayor producción de hierba que el sitio de control. Aunque esta combinación fue creada para fomentar la producción energética, acabó generando un entorno más óptimo durante los años secos.
Así las cosas, la humanidad ha descubierto cómo salvarse en un sentido más amplio. Además, se asegura que los paneles solares pueden tener una segunda vida en sistemas agrivoltaicos.
