El hallazgo de energía infinita es toda una revolución, pero el hecho de tener que bajar al fondo del mar a buscarla es un problema. El concepto ‘energía infinita’ es realmente intrigante y ya lo hemos escuchado en otros proyectos, como el de los combustibles alternativos. Ante la necesidad constante del ser humano de obtener energía para realizar sus actividades diarias, este concepto se ha instaurado en el imaginario de muchos aficionados al sector energético.
Se imaginan la posibilidad de encontrar esa fuente de energía perfecta que nunca se acabe. Sin embargo, más de uno se ha encontrado en un callejón sin salida. Según las leyes de la termodinámica, la energía no puede crearse ni destruirse, simplemente se transforma en otra. Es decir, ‘muta’ de una forma a otra.
Algunos científicos han coqueteado con la idea de alcanzar esa energía inagotable, proponiendo ideas audaces para la obtención de energía de fuentes presentadas como eternas. Hoy te presentamos una de ellas que promete lo que muchos consideran imposible, pero ¿estaremos a tiempo de conseguir lo que otros ya han desestimado?
¿La energía infinita está en el fondo del mar?
La energía infinita ubicada en el fondo del mar a la que nos referimos es la energía undimotriz, también conocida como olamotriz. Se genera con el aprovechamiento del movimiento de las olas, por lo que se considera una energía sostenible con un increíble potencial, puesto que hay olas en todos los mares y costas del mundo.
Hay un gran número de proyectos sacándole partido. Un ejemplo claro es el de la empresa finlandesa AW-Energy y su iniciativa llamada “WaveRoller”, que usa energía undimotriz para generar electricidad en grandes cantidades. Esta tecnología se instala entre 8 y 20 metros bajo el mar, conservándolo anclado al lecho marino.
Dicha tecnología ha sido materializada en un artefacto que puede sumergirse total o parcialmente dependiendo de la condición de las mareas del lugar en el que sea ubicado. Asimismo, también se tiene en cuenta el efecto que se espera que las olas generen en el aparato.
AW-Energy recibió ayuda del proyecto WaveFarm, financiado por la Unión Europea, para ampliar su producción de energía undimotriz a escala industrial. Esta iniciativa ha impulsado a la compañía para adaptar la unidad WaveRoller y los procedimientos vinculados para la fabricación en serie y la instalación en múltiples unidades WareRoller conjuntamente con WaveFarm.
El mar esconde la energía infinita
El mar se ha transformado en un recurso muy atractivo para la producción eléctrica, siendo visto por los expertos como la ‘cuna’ de la energía infinita. De hecho, hay otro tipo de energía que también llama la atención y proviene del mar: la energía mareomotriz.
La principal diferencia entre ellas radica en la fuente de producción de cada una. Cuando hablamos de la energía mareomotriz nos referimos al aprovechamiento de las mareas, mientras que al hablar de undimotriz nos referimos al movimiento de las olas del océano.
Cabe destacar que la energía mareomotriz utiliza la fuerza generada por las mareas y dispone de varias instalaciones en todo el mundo. Por otro lado, las instalaciones de energía mareomotriz están situadas en las costas o en zonas profundas. Se aprovecha especialmente en ámbitos con grandes diferencias de altura entre mareas, como Canadá, Francia y Corea del Sur.
En contraposición, la energía undimotriz puede explotarse en cualquier zona costa que ostente la presencia de olas oceánicas, como Portugal, Escocia o Australia. Ambas energías tienen un considerable potencial, pero su eficiencia depende de varios factores, como las condiciones del lugar, la tecnología empleada y la inversión en infraestructura.
En definitiva, cuando se habla de fuente de energía infinita, muchos lo asocian con el fondo del mar y, proyectos como el ya mencionado, demuestran que pueden no estar equivocados. Si te interesan los temas relacionados con energías eternas, no puedes perderte el lugar más peligroso de la Tierra que esconde energía infinita.