Un grupo de científicos ha descubierto algo inquietante sobre el agua. Una sola gota de agua es 10 veces más poderosa de lo imaginado. El agua es un recurso esencial para la vida en la Tierra, pero también puede convertirse en una fuente de energía renovable y sostenible. Con el paso del tiempo, los seres humanos han sabido aprovechar la fuerza del agua para producir energía y llevar adelante diferentes actividades.
Entre las formas más habituales de aprovechar el agua como fuente de energía destaca la energía hidroeléctrica. Se trata de un tipo de energía que se consigue a través del uso de la fuerza del agua en movimiento, como ríos o cascadas.
Dicha fuerza se emplea para hacer girar turbinas que originan electricidad. Las centrales hidroeléctricas son consideradas una fuente de energía limpia y renovable, puesto que no difunden gases de efecto invernadero ni contaminantes.
Pero la energía hidroeléctrica no es la única manera de aprovechar el agua como fuente de energía. También existe otra llamada energía mareomotriz, que aprovecha el movimiento de las mareas para producir electricidad. Conforme la tecnología avanza, se van descubrimiento nuevas formas de ensalzar el agua como fuente energética.
Una gota de agua encierra una cantidad de energía que nunca hubiéramos imaginado
Un grupo de investigadores australianos de la Universidad RMIT y la Universidad de Melbourne manifiestan que el movimiento del agua sobre una superficie puede producir hasta 10 veces más carga eléctrica de lo estimado.
Este descubrimiento podría marcar un antes y un después en el diseño de materiales que pueden aplicarse en seguridad, almacenamiento de energía y sistemas de combustibles renovables. El estudio encabezado por el Dr. Joe Berry, el Dr. Peter Sherrell y la profesora Amanda Ellis puso en valor que cuando una gota de agua se topa con una pequeña imperfección en la superficie, esta queda atrapada por un momento antes de deslizarse.
Un comportamiento denominado movimiento stick-slip que origina una carga eléctrica irreversible que no se había documento con anterioridad. Según Sherrell, hasta ahora el pensamiento era que la carga eléctrica se originaba cuando una gota de agua dejaba una superficie. Sin embargo, el nuevo estudio expone que la carga es mucho más grande cuando el agua roza la superficie por primera vez.
Mientras el mundo mira de cerca este hallazgo, aseguran que, pese a que el nivel de agua de las cuentas internas de Cataluña aumenta, la sequía persiste.
Una gota de agua resulta ser mucho más poderosa de lo que nadie pensó
Para verificar la existencia de este fenómeno, los expertos midieron la carga eléctrica provocada por gotas de agua en contacto con politetrafluoroetileno (PTFE), material usado en teflón y publicaron el estudio en Physical Review Letters. Se usó una cámara de alta velocidad para capturar cada “salto” de las gotas de agua y medir en simultáneo las modificaciones de carga.
Los resultados evidenciaron que la primera interacción de agua con la superficie ocasionaba una modificación de carga de 0 a 4,1 nanoculombios (nC), y luego la carga oscilaba entre 3,2 y 4,1 nC conforme el agua se movía.
Proyección del experimento de las gotas de agua: su llegada puede cambiar el mundo
Conocer que la producción de carga eléctrica por el movimiento de líquidos es vital para garantizar la seguridad al utilizar nuevos combustibles renovables como hidrógeno y amoníaco. Actualmente, la acumulación de carga en contenedores de combustible se aminora a través de aditivos y restricciones de flujo. Sin embargo, estas soluciones podrían no resultar efectivas con nuevos combustibles.
El equipo seguirá investigando este fenómeno en otros tipos de líquidos y recursos para evaluar su posible impacto sobre aplicaciones industriales. Lo descubierto hasta ahora tiene potencial suficiente para transformar la generación y almacenamiento de energía, brindando nuevas maneras de aprovechar la carga eléctrica elaborada naturalmente en procedimientos habituales.
Podría adoptarse en los siguientes escenarios sostenibles: mejor eficiencia en baterías y supercondensadores, reducción de riesgos en el manejo de combustibles renovables y aprovechamiento de la electrificación del agua en métodos de captación de energía ambiental.
El hallazgo de esta carga irreversible podría convertirse en la inspiración de nuevas tecnologías de energía limpia, optimizando la eficiencia y seguridad de los sistemas energéticos renovables y sostenibles.
En definitiva, el grupo de científicos mencionado descubrió que una gota de agua es 10 veces más poderosa de lo imaginado. Por otra parte, otro equipo sacó a la luz que para tener luz ahora solo es necesario contar con agua y sal.