Madrid tiene la solución energética definitiva para España bajo el suelo. En la actualidad, el mundo tiene por delante grandes y graves desafíos energéticos que están llevando a la humanidad a buscar nuevas fuentes de energía. Este fenómeno está sujeto en gran parte al agotamiento de los recursos naturales convencionales, como los combustibles fósiles, además de los problemas ambientales que acarrea su uso (a saber, el cambio climático).
Otro punto importante que fomenta la búsqueda constante de nuevas fuentes de energía es la dependencia que vislumbran muchos países de combustibles fósiles importados. Este escenario los expone a fluctuaciones de precios y conflictos geopolíticos, además de perjudicar su seguridad energética a largo plazo. La diversificación de las fuentes de energía sería la solución a este problema.
Sumado a estos factores, la búsqueda de nuevas fuentes de energía renovable ha sido favorecida por el avance de la tecnología y la disminución del costo de producción. Esto ha tenido como consecuencia que energías hasta ahora olvidadas sean cada vez más visibles desde el punto de vista económico. Bajo estas circunstancias, Madrid tiene energía infinita bajo su suelo.
Madrid es el Santo Grial de energía infinita en España: está bajo el suelo y su potencial es monumental
La energía infinita bajo el suelo a la que nos referimos es la energía geotérmica, considerada infinita porque el calor acumulado en el subsuelo se renueva de manera constante. Cabe destacar que la energía geotérmica aprovecha el calor interno de la Tierra, disponible en rocas, suelos y aguas subterráneas, para producir electricidad y calefacción.
En este caso, se usa la temperatura y presión del subsuelo para generar vapor o agua caliente, que genera movimiento en turbinas conectadas a generadores eléctricos. Este tipo de energía renovable alberga mucho más que potencial para producir energía. También es válida para la calefacción y refrigeración de edificios (aquí te contamos más sobre todo lo que esta energía puede ofrecerte).
España le otorga la importancia que se merece a la energía geotérmica. Así queda plasmado en el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC), cuyo objetivo es lograr 30 MW de capacidad geotérmica para la producción eléctrica para 2030. Además, el país europeo ya ha establecido el compromiso de ejecutar sondeos profundos de más de 1.000 metros para analizar la disponibilidad de recursos geotérmicos de alta temperatura.
El Gobierno español ha escogido un proyecto en Madrid como el primero para explorar la generación de electricidad geotérmica a gran escala. Una iniciativa que se está financiando con una ayuda de 5 millones de euros y será desarrollada por la compañía Repsol.
Madrid tiene la “varita mágica” para acabar con los combustibles fósiles en España: se llama energía geotérmica
El “Estudio de Viabilidad del Proyecto de Energía Geotérmica en Madrid” forma parte de los 14 proyectos aprobados por el Instituto para la Diversificación y el Ahorro de la Energía (IDAE), organismo encargado de repartir el capital del Fondo de Recuperación y Resiliencia de la UE.
Pese a que la financiación es provisional y sujeta a alegaciones, la inversión de 120 millones de euros será un paso esencial para expandir la energía geotérmica en España, sobre todo en la capital (que solo produce el 4,8% de la energía que consume).
¿Qué significa el proyecto geotérmico de Madrid para España?
Si las exploraciones subterráneas de Madrid culminan de manera satisfactoria, España podría situarse entre los primeros proyectos de geotermia profunda para la producción de electricidad. La diversificación de la región madrileña a través del aprovechamiento de energía geotérmica subiría su nivel de autosuficiencia y contribuiría a un modelo energético más equilibrado entre las diferentes comunidades autónomas con repercusiones económicas para todo el país.
Madrid tiene bajo el suelo una energía infinita que podría significar el paso que España necesita para desprenderse de los combustibles fósiles. Un proyecto que tiene conmocionado al centro del país y que te ampliamos en este artículo.