La palabra “autoconsumo” nos transporta directamente a otro concepto: “paneles solares”. De hecho, durante muchos años ha sido así. Sin embargo, el avance de la tecnología ha traído de la mano nuevos inventos que nos reconcilian con la idea de que existen otras formas de autoabastecer de energía. Un caso llamativo fue el de las tuberías que pueden producir electricidad.
Ahora aparece en el centro de la escena un hexágono que utiliza el viento para generar electricidad. Las innovaciones tecnológicas aparecen prácticamente cada día ante la creciente necesidad de conseguir nuevas formas de autoabastecimiento.
Una de las energías que está en auge es la eólica y es precisamente la que se está viendo afianzada con unos hexágonos que no tienen nada que envidiarles a los clásicos paneles solares. ¿Preparado/a para una noticia increíble? ¡No podrás creerlo!
El autoconsumo cambia de “rostro”: los paneles solares ya no son los únicos protagonistas
Llega lo último en aerogeneradores eólicos. Un modelo que produce energía incluso a nivel de suelo. Son nuevos mini aerogeneradores eólicos preparados para generar energía en entornos urbanos. Pequeños, pero de lo más eficientes.
Un molino de viento hace el mismo trabajo, pero haciendo uso de estructuras enormes con aspas giratorias. Los hexágonos de los que te hablamos son una “copia”, pero reducida a una caja compacta en forma de rejilla con un aspecto similar al de un panal de abejas.
Estamos ante una revolución en la energía eólica, algo nunca visto que tiene a los científicos impresionados. Katrick Technologies quería hacer historia y lo consiguió a base de un invento eficiente y estético.
Estos miniaerogeneradores aprovechan la energía del viento a través de perfiles aerodinámicos oscilantes que barren el conducto para capturar la energía sólida de las ráfagas y turbulencias de bajo nivel.
Su movimiento hace posible que la tecnología usada reaccione rápido a los cambios instantáneos producidos por la velocidad del viento en condiciones a nivel de suelo. Un cambio drástico en comparación las turbinas de altura, que se sitúan en lugares altos.
Los paneles solares son historia con esta nueva forma de autoconsumo
Ofrecen una solución diferente y práctica, pudiendo ser utilizados en zonas urbanas. A diferencia de lo que sucedería con un aerogenerador “grande”, estas mini turbinas eólicos no suponen un impacto visual fuerte.
Presentan dos características fundamentales. La primera es su mecanismo de canalización. Un conducto canaliza más viento hacia el rotor, aumenta la velocidad y, por ende, la producción de energía. La segunda característica es la forma hexagonal que tiene cada panel.
Son independientes unos de otros y permiten tanto acopio como que la energía del viento se recoja en bolsas más pequeñas. Flexibles y escalables, pueden instalarse en varios tipos de estructuras (desde tejados de casas hasta a nivel de suelo).
Los paneles solares tiemblan ante el autoconsumo que supera toda expectativa
El prototipo superó todas las expectativas que había sobre él en la Universidad de Strathclyde. Produjo un promedio de 41.1 vatios (W) de potencia mecánica a una velocidad de viento de solo 10.2 metros por segundo (m/s), cuando lo que se esperaba era una producción entre 25 y 40 W a 12 m/s. Su eficiencia promedio fue de 6,85%, sobrepasando las metas de diseño.
“No es solo un avance tecnológico, es un símbolo de cambio hacia un futuro más sustentable. Con su diseño único y resultados prometedores, esta tecnología tiene el potencial de transformar significativamente el panorama de la energía renovable, ofreciendo una solución viable y eficiente para la generación de energía limpia, incluso en entornos urbanos”, señala la compañía.
Cada vez queda más claro que los paneles solares no son los únicos que pueden aportar energía en el campo del autoconsumo. De hecho, ya hay varias propuestas que podrían sacarlos de circulación, como el proyecto de la “segunda piel” de los edificios.