Los paneles solares podrían desaparecer para siempre con la aparición de un globo que solo necesita nieve para funcionar. Un objetivo que también persigue este muro de levitación magnética. La conquista de la energía solar en los tejados de España (con paneles solares) ya es un hecho. Los paneles solares capturan la luz solar y proveen de electricidad barata a las viviendas para ahorrar la factura de la luz a fin de mes.
Sin embargo, esta tecnología todavía se topa con varios inconvenientes para los que ya están apareciendo alternativas como discretos aerogeneradores o placas protegidas dentro de esferas.
Uno de los retos a los que se exponen las células fotovoltaicas es la climatología. Para hacerle frente, se necesitan sistemas eficientes de limpieza y protección para mantener en funcionamiento los paneles solares todos los días del año, tanto en espacios áridos con mucho polvo como zonas de montaña en las que la nieve puede cubrir los paneles.
Los paneles solares pasan a un segundo plano con la irrupción de este globo
Un grupo de investigadores de las universidades de Mälardalen (Suecia), Jiaotong del Suroeste y Guizhou, ambas situadas en China, han elaborado y probado un nuevo sistema de energía solar en las viviendas. Permite la adquisición de electricidad asequible durante todo el año sin importar el factor climatológico.
Es posible obtenerla, aunque llueva, nieve o tenga lugar una tormenta de arena del desierto. Los resultados de este desarrollo fueron publicados en el artículo “Un sistema fotovoltaico portátil integrado en globos desplegado a baja altitud”, difundido en la revista científica Energy.
Con la irrupción de las bajas temperaturas, surgen alertas por nieve que se convierten en un inconveniente real para la producción de energía limpia en el techo de los hogares. Este escenario cambiaría rotundamente con la llegada de este nuevo sistema de instalación rápido. Lo han denominado sistema fotovoltaico integrado en globos (BIPVS).
Estamos ante un globo transparente de enormes dimensiones que acoge placas solares protegidas en su interior. Su disposición se muestra como una media esfera al suelo y se eleva por encima de los árboles y otros edificios. Así, el único impedimento para recoger la luz solar son las nubes. La electricidad que proviene de las placas solares ubicadas en el interior de la esfera se traslada al suelo y la casa cercana con un cable eléctrico.
Junto a este cable, y otros cuatro, además de una cuerda, conservan estable el globo frente a vientos fuertes. Cabe destacar que las células están diseñadas con telururo de cadmio (CdTe) de película fina con una eficiencia del 19 %. Asimismo, dentro del globo quedan protegidas del polvo, la nieve y el granizo.
Este globo acaba con el reinado de los paneles solares
El globo registra dos partes: una mitad es transparente mientras que la otra es reflectante. La parte superior permite pasar la luz hasta las placas solares interiores y la parte inferior rodea las células fotovoltaicas, al tiempo que concentra la luz solar con reflectores.
Este conjunto de elementos se conserva en el aire con una combinación de aire y helio de baja densidad; una válvula de escape que realiza un intercambio de gases y mantiene la presión interior que puede elevarse por la incidencia del Sol en el globo.
El equipo ha ejecutado pruebas con su sistema a nivel local y ha usado diversas simulaciones para establecer el rendimiento del BIPVS en 5 ciudades del mundo. Con este procedimiento, pusieron de manifiesto que la producción mensual promedio de uno de sus globos se sitúa entre 3,5 y 4 GWh de energía.
Este globo, que solo necesita nieve para funcionar, podría liquidar el uso de los paneles solares. Lo más interesante es cómo funciona y dispara la potencia de las placas convencionales, algo de lo que te contamos más en este artículo.