Francia tiene su poder el transporte perfecto. Se trata de una pieza eléctrica que no utiliza ni baterías ni cables de carga. Ya resulta innegable el cambio desbordante que está teniendo el campo de la movilidad. El desarrollo de la tecnología y la preocupación medioambiental están permitiendo la evolución de medios de transporte que movilizan la economía y el día a día del ser humano.
Una de las grandes alteraciones que se ha vivido en los últimos ha sido el incremento del uso de vehículos de movilidad personal (VMP), como patinetes eléctricos y bicicletas. La electrificación de estos medios de transporte los ha hecho más cómodos y ágiles, contribuyendo en gran parte a la extensión de su uso.
También se han alzado en popularidad debido a otros fenómenos como el uso compartido mediante aplicaciones. Las ventas de los VMP crecen todos los años de dos a tres dígitos en los países de Europa, según consigna Mapfre. Cada vez se extienden más los carilles bici en sus ciudades, un movimiento que también está ganando terreno en Latinoamérica.
Francia sorprende al mundo con el transporte perfecto: es eléctrico, pero no usa baterías
En este contexto, Francia tiene mucho que decir con su Pi-Pop, una bicicleta creada en Francia que no usa enchufes y baterías externas, puesto que se recarga exclusivamente con el pedaleo del ciclista y la frenada regenerativa. Tras esta impactante iniciativa, encontramos a Adrien Lelièvre, un ingeniero que, aunque al principio recibió formación en música y arte, finalmente apostó por la tecnología para garantizar su futuro.
Su primer pensamiento fue la industria del lujo. No obstante, su interés por las cosas novedosas lo llevó a especializarse en este campo y crear una tecnología que podría cambiar la movilidad de Francia y otras partes del mundo. El sistema Pi-Pop no usa litio, por lo que convierte a esta bicicleta en una opción más ecológica y sostenible dentro del creciente mercado de las bicicletas eléctricas.
Esto debido al empleo de supercondensadores alojados en el portaequipajes trasero junto con la electrónica. No albergan litio. En su lugar, se utilizan materiales reciclables y abundantes, disponibles en casi todo el mundo, como es el caso del aluminio. Al contrario de lo que sucede con las baterías tradicionales, que se cargan desde un enchufe, el método Pi-pop se recarga al mismo tiempo que el usuario pedalea.
Un producto revolucionario que asombra tanto como la irrupción de esta bicicleta eléctrica por menos de 500 euros.
Francia apuesta por la bicicleta eléctrica: ofrece al mundo el transporte perfecto
La bicicleta, que dispone de un motor de 250 W, almacena energía en llano, en bajadas y frenadas, para después liberarla cuando sea necesario (al momento del arranque, en falso llano, en cuesta o con el viento en contra).
Su capacidad de almacenamiento es menor a la de una batería tradicional. Por lo tanto, no asegura una asistencia continua pasada una pendiente de 100 metros. A cambio, Francia ofrece un producto con una vida útil muy superior, con cientos de miles de ciclos de carga y descarga, que equivalen a entre 10 y 15 años usándola diariamente.
¿Cuándo vale el transporte perfecto que propone Francia?
Sus creadores advierten que no se recomienda su uso en áreas muy montañosas, pero sí resulta el transporte perfecto para implementar en poblaciones o zonas con desniveles bajos o medios. Un contexto que le permite disfrutar de una autonomía prácticamente ilimitada, sin depender de recargas de baterías regulares.
Asimismo, este “transporte perfecto” genera un impacto ambiental menor en su producción. Esta pieza ya está a la venta en Francia por 2690 euros. Aunque se ofrece al mundo como una pieza inigualable, hay quienes aseguran haber creado algo mejor: un modelo que usa un combustible líquido.