Toyota desiste con los coches de hidrógeno ante la aparición del nuevo proyecto de Airbus. Acaba de mostrar el futuro y rompe con todo lo que hemos visto hasta ahora. Si el motor que fusiona hidrógeno con un poderoso nuevo combustible logró sorprenderte, no puedes perderte lo que viene a continuación. El hidrógeno es una de las fuentes de energía más prometedoras de cara al futuro.
Varios expertos coinciden en que su adopción ayudará a la humanidad a paliar la crisis energética. Asimismo, argumentan que se trata de una herramienta vital para bajar las emisiones de gases de efecto invernadero. Es una energía limpia para alimentar vehículos, impulsar procesos industriales y producir electricidad.
En el campo del transporte, el uso del hidrógeno como combustible alberga un gran potencial. Los vehículos de pila de combustible de hidrógeno (FCEV) son una aplicación interesante en términos climáticos. Estos vehículos emiten solo vapor de agua y pueden brindar un rango comparable al de los modelos movidos por gasolina con tiempos de recarga mucho más ágiles que los eléctricos. Conforme el mundo avanza hacia un futuro energético más sostenible, el hidrógeno toma impulso como posible heredero de los combustibles fósiles.
Uno de los beneficios más destacados del hidrógeno es su potencial para aminorar el impacto ambiental de las actividades energéticas. Al usar hidrógeno producido a partir de electrólisis de agua con electricidad renovable, el ciclo de vida completo puede alcanzar las cero emisiones. En contraposición a los combustibles basados en carbono, la única emisión que deja un vehículo de hidrógeno es vapor de agua.
Toyota se rinde ante Airbus: busca llevar el hidrógeno a lo más alto
Airbus ha sido protagonista de un histórico avance con el encendido de su primer motor eléctrico de pila de combustible de hidrógeno. El programa ZEROe de Airbus cumple uno de los hitos más significativos en su hoja de ruta: montar nuevos motores de hidrógeno en sus futuros aviones eléctricos.
El programa ZEROe de Airbus es una iniciativa focalizada en la ‘confección’ de varios conceptos de aviones cero emisiones, que abarcan piezas destinadas a la quema de combustible y pilas de hidrógeno.
Bajo estas circunstancias, el objetivo mayoritario es dar un paso adelante en la descarbonización de la industria de la aviación. En septiembre de 2020, Airbus presentó tres prototipos de aeronaves en el marco del programa ZEROe. El primero correspondía a una turbohélice de hidrógeno para vuelos regionales, mientras que el segundo era un avión de hidrógeno mixto de medio alcance con un fuselaje de mezcla de ala fija y alas de tipo volante.
Por último, el tercer prototipo mostrado fue un avión de cuerpo ancho de gran capacidad para vuelos de larga distancia. Años después, el programa roza un momento histórico con el encendido del primer motor eléctrico alimentado por una pila de combustible de hidrógeno.
Los tres conceptos mencionados se engloban dentro de la visión de Airbus de investigar nuevas soluciones que aminoren las emisiones de carbono en la aviación. Vislumbra un futuro en el que el hidrógeno pasa a ser una fuente primaria de energía.
Airbus hace historia con el hidrógeno y opaca los coches de hidrógeno de Toyota
El encendido del motor de Airbus es un paso de gigante dentro del programa ZEROe. La finalidad de los ensayos progresar en la creación de un sistema de propulsión capaz de hacer funcionar un avión movido exclusivamente por hidrógeno para comenzar su actividad en 2030.
Frente al avance de Airbus en el terreno del hidrógeno (del que te contamos mucho más en este artículo), Toyota se despide ya de su motor de hidrógeno. Los coches de hidrógeno quedan completamente opacados ante esta revolucionaria tecnología.