Animales con una audición increíble. Nuestra capacidad auditiva se encuentra limitada a percibir todos aquellos sonidos que se hallen en el rango de los 2 a los 5 kilohertzios en general. Pero existen animales cuyo oído es muchísimo más fino que el nuestro. Y que oyen cosas que los seres humanos somos incapaces de escuchar.
Cada uno de los diez animales que presentamos como ejemplos (que conste que hay muchísimos más), es capaz de escuchar varias veces por encima y por debajo de la capacidad que tenemos las personas. Eso abarca tonos de extrema gravedad y otros muy agudos, hasta llegar a los ultrasonidos.
En todos los casos esta increíble capacidad es fruto del desarrollo evolutivo. Ya sea por adaptación al medio, por escapar de sus presas o ser más eficaces al cazarlas y en general como un recurso más para sobrevivir.
Polilla de la cera
Esta pequeña polilla (Galleria Mellonella) tiene la mayor capacidad auditiva del Reino Animal. Pero lo que es más fascinante aún es que lo ha conseguido para poder sobrevivir, ya que sus predadores naturales son los murciélagos que cazan a sus presas por eco-localizador.
Para ser capaz de escapar de ellos, esta polilla ha desarrollado un sistema auditivo de sensibilidad ultrasónica. Este le permite escuchar en un rango superior a los 100 Hertz sobre lo que perciben los murciélagos. Una increíble estratagema evolutiva que les ha permitido burlarlos.
Elefantes
En realidad, el hecho de que estos enormes paquidermos tengan tan buen oído no se debe solo a la conformación de sus grandes orejas (que ayudan, pero no son la única razón). Si no al desarrollo de su oído interno. Eso es lo que les permite escuchar frecuencias 20 veces más bajas que las que oímos los seres humanos. El rango de audición del elefante es de un mayor alcance, ya que se halla entre los 12 y los 16 kilohercios.
Murciélagos
Estos pequeños mamíferos voladores, que en general tienen vida nocturna, poseen un sistema de sonar biológico llamado eco-localización. Este les permite trasladarse en plena oscuridad y cazar a sus presas o localizar sus fuentes de alimentos en la naturaleza. Su nivel de frecuencia es de alrededor de 212 kilohercios.
Delfines
Al igual que los murciélagos, los delfines utilizan la eco-localización: lanzan un sonido a través del agua y aguardan hasta recuperar el eco del mismo para saber donde están posicionados ellos, sus posibles presas y los detalles del entorno que les rodea. Su rango de frecuencia es de 75 a 150 kilohercios.
Gatos
No es fácil sorprender a un gato, aun cuando este esté aparentemente dormido y la explicación de ello es muy simple. Los gatos tienen una buena gama de frecuencias que va desde los 45 a los 64 kilohercios. Por ello su capacidad auditiva resulta mucho mejor y más eficaz que la nuestra. En general, este es el rango de frecuencia que tienen casi todos los felinos.
Perros
La audición de un perro es similar a la de un gato, oyen mejor en un tono más alto e incluso pueden diferenciar sonidos de pasos, de motores o de timbres de voz. Por eso no es extraño que ellos sepan que llegamos a casa, mucho antes de que pongamos la llave en la cerradura.
Búhos
El rango de frecuencia de un búho se encuentra entre los 12 y los 200 kilohercios, si a ello le sumamos que tienen una vista excelente y que son capaces de darle a sus cabezas giros de casi 360º, es entendible que desde una rama sean capaces de elegir a sus presas. Animales con una audición increíble
Ratas
Estos roedores tienen unas enormes capacidades de adaptación que le han permitido sobrevivir a todo tipo de circunstancias. Una de ellas es su fino oído, con un rango entre los 76 y los 200 kilohercios. Este recurso les permite incluso oír a una araña bajando por una tubería de drenaje.
Caballos
Los caballos, como en general todos los mamíferos terrestres, que pueden ser atacados o depredados por animales que vuelan. Por ello tienen una capacidad auditiva mucho mejor que su vista. El rango de frecuencia de los equinos es de 33 y los 55 kilohercios. Además, pueden orientar sus orejas en la dirección del sonido.
Palomas
Las palomas tienen una frecuencia de audiencia increíblemente baja que ronda los 0.5 Hertz. Esto les ayuda a oír el sonido cuando viajan a grandes distancias. Y hasta a detectar las condiciones meteorológicas de su trayecto (ya que oyen la lluvia, las tormentas y/o los truenos). Animales con una audición increíble.