La trashumancia es una práctica ancestral que consiste en el desplazamiento estacional de los rebaños, principalmente de ovejas y vacas, entre las zonas de pastoreo de invierno y verano. Una costumbre que ha sido fundamental en la economía y cultura de muchas regiones, especialmente en Europa, como en la Península Ibérica, los Alpes y los Pirineos, así como en otras partes del mundo.
Además, el pastoreo permite aprovechar de manera sostenible los recursos naturales, evitando la sobreexplotación de los pastos y ayudando a mantener el equilibrio ecológico de los ecosistemas. De ahí las acciones que se pusieron en marcha hace unos días por parte de Dula y la Fundación Global Nature para poner en relevancia los valores de la trashumancia y su importancia en el ecoturismo rural.
Recuperando la trashumancia e impulsar el ecoturismo rural en la ‘Laguna del Cañizar’
Durante los días 24 y 25 de julio, la Laguna del Cañizar (Teruel) acogió unas jornadas únicas cuyo objetivo fue recuperar el valor cultural, ambiental y económico de la trashumancia y el pastoreo extensivo. La Asociación Cultural La Dula, Fundación Global Nature y la iniciativa «Naturaleza pastoreada» hicieron posible este evento que combinó experiencias prácticas con animales, talleres de oficios tradicionales (herraje, trilla y manejo de ganado), además de degustaciones de gastronomía local y mesas técnicas con expertos. El resultado fue un espacio de encuentro entre pastores, técnicos, responsables institucionales y agentes del medio rural.
Hubo tiempo para profundizar en la iniciativa Naturaleza Pastoreada, así como en la trayectoria y las actividades actuales que desarrolla la Asociación de Ganaderos Trashumantes de caballos La Dula. En concreto, Naturaleza Pastoreada se desarrolla entre octubre del año 2022 y septiembre de 2025 en diversos espacios protegidos, es decir, en áreas terrestres que, en reconocimiento a sus valores naturales sobresalientes, están específicamente dedicadas a la conservación de la naturaleza y sujetas, por lo tanto, a un régimen jurídico especial para su protección.
Su objetivo principal es poner en valor el pastoreo como una actividad económica necesaria en el actual contexto del reto demográfico para la conservación de la naturaleza, la recuperación económica y la lucha contra el cambio climático. Naturaleza Pastoreada cuenta con el apoyo de la Fundación Biodiversidad del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO) en el marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR), financiado por la Unión Europea – NextGenerationEU.
Una experiencia piloto de inmersión en el mundo rural
El evento se estructuró en dos días: una experiencia piloto de inmersión rural el jueves 24 de julio que incluyó una visita a la manada de caballos trashumante, demostraciones de herraje y trilla, degustación de gastronomía de campaña, demostración del oficio del vaquero y pequeña trashumancia con bueyes, y finalmente observación astronómica nocturna. Y una jornada técnica y creativa el viernes 25, centrada en definir líneas de continuidad para activar experiencias ecoturísticas sostenibles ligadas al pastoreo.
Uno de los momentos más inspiradores tuvo lugar en el cine La Porfi, de Villarquemado, donde se presentó la iniciativa audiovisual «Filmobitácora», que recogerá en formato documental las memorias, prácticas y paisajes trashumantes del Jiloca.
Además, las jornadas contaron con la participación activa de especialistas del sector agroambiental, así como de representantes locales, como el Ayuntamiento de Cella y Villarquemado, el CROA, agentes culturales, medio ambientales y turísticos de la Comarca del Jiloca y la comunidad Valenciana, Red impulsa Jiloca, Acobija, ganaderas en red entre otros.
La experiencia también permitió testar los recursos de alojamiento rural como la Masía Los Camineros y Las Masadas, y evaluar el potencial de las cabañas de la Laguna del Cañizar como núcleo de ecoturismo y educación ambiental. Las conclusiones de estas jornadas servirán como base para elaborar una hoja de ruta de experiencias turísticas y pedagógicas que fortalezcan la economía local, promuevan la biodiversidad y devuelvan protagonismo a las formas de vida campesina en el territorio.
Sin duda, unas jornadas que justifican la protección de la trashumancia y pastoreo como claves para conservar la biodiversidad, mantener los paisajes rurales y promover prácticas agrícolas sostenibles. Todo un símbolo de la relación armoniosa entre humanos y naturaleza, reflejando un modo de vida respetuoso con el medio ambiente. ECOticias.com