La nevera, la cocina, el horno… los electrodomésticos de la cocina son indispensables eso está claro, pero ya que su uso es inevitable ¿cómo podemos ahorrar energía con ellos? Hoy os cuento algunos consejos muy sencillos que todos los miembros de la casa pueden adoptar. Evitar el despilfarro de energía está en nuestras manos, ¿te apuntas a reducirlo?
Ahorra energía con los electrodomésticos
Cada gesto cuenta, lo vengo diciendo desde hace mucho. Si eres de los que te preocupa el consumo de todos los electrodomésticos y aparatos de la cocina, sigue leyendo, estos hábitos van a ayudarte y mucho a reducir el consumo de energía.
La nevera
Es muy importante adaptar la temperatura de la nevera dependiendo del clima: cuando hace calor, baja la temperatura y al revés cuando haga frío. ¿La temperatura ideal para la nevera? Entre 3 y 5 grados centígrados y la del congelador entre -18 y -15.
Algunos gestos que también marcan la diferencia, es evitar abrir la nevera de forma innecesaria. También procura no introducir alimentos calientes, esto hace que la nevera trabaje más. La colocación de del frigorífico también influye, deja un espacio entre la pared para que el calor residual fluya y aléjalo de otros electrodomésticos que den calor.
La vitrocerámica
Cuando cocines, el tamaño del fuego y de las sartenes es importante, utiliza el adecuado para aprovechar toda la energía. A la hora de cocinar tapa ollas para que los alimentos se cocinen más rápido y apaga 5 minutos antes para aprovechar el calor residual.
El horno
Primero debes saber que el horno es uno de los elementos que más consume de la cocina, si vas a utilizar hazlo con grandes cantidades de comida y no para descongelar o calentar. Para ser más eficientes, intenta organizarte para hornear varias cosas a la vez o, al menos, una tras otra. Y por supuesto, no abras la puerta del horno mientras se cocina y aprovecha el calor residual para terminar la cocción.
El lavavajillas
Llenar por completo el lavavajillas y utilizar los programas eco puede marcar la diferencia en el ahorro de electricidad y agua de este electrodoméstico tan utilizado en muchos hogares. Si tienes que lavar a mano, el agua fría también es otra gran forma de ahorrar.
Los pequeños electrodomésticos
Siempre que sea posible elige electrodomésticos con la etiqueta energética A+++. Tienen un coste algo más elevado pero a la larga son una buena inversión y mucho más eficientes.
Por último recuerda, muchos electrodomésticos continúan consumiendo en modo “stand by”, cuando no los utilices apágalos.
Ir al supermercado “con cabeza”
Uno de los puntos más importantes además del consumo de energía en la cocina es ser eficientes a la hora de comprar comida en el supermercado. Y es que es uno de los focos de mayor despilfarro y un sector que genera grandes emisiones de CO2 a la atmósfera.
- Compra solo lo que necesitas: puede parecer una tontería, pero muchos estudios afirmar que acudir a la compra con el estómago vacío o con mucha hambre, te hace comprar productos que no necesitas sino que se te antojan en ese momento.
- Reducir el consumo de carne: ¿Sabías que la industria cárnica es una de las más contaminantes del mundo? El 14,5% de las emisiones globales proceden de la ganadería. Por ello una dieta con menos carne, nos ayudará a consumir más verduras y fruta y a producir menos gases de efecto invernadero. ¿Te animas?
- Productos de proximidad: Además de fomentar el comercio interno de tu propia ciudad, concejo o provincia, se tiene un mayor conocimiento de los productos que consumimos, son más saludables ya que son de temporada… y un largo etcétera. Uno de sus puntos fuertes es que estos productos también llamados de “km 0”, contribuyen a reducir las emisiones de CO2. Imagina como disminuye la contaminación si la cercanía del lugar de producción y de consumo están en un radio de 100 km.
- ¡Evita los plásticos!: Buscar productos en el supermercado en formato familiar, llevar nuestra propia bolsa de la compra… Son solo algunos gestos que pueden marcar la diferencia.
¡Practica el batch cooking!
Quizás algunos os preguntéis qué es el batch cooking, esta nueva tendencia que está pegando fuerte para cocinar de forma sostenible no es tan moderna como parece. ¿Y si os digo que hacer batch cooking, es cocinar grandes cantidades y planificar el menú de toda la semana?
Esta tendencia que seguro muchos practicáis pero no sabías que se así se llamaba, es una forma de ahorro energético en la cocina. ¿Cómo? Al cocinar en varias horas toda la comida de la semana evitamos encender el resto de días la cocina y ahorramos mucha energía aprovechando en un mismo momento todo el calor de la vitrocerámica.
¿Cuidas lo que tiras?
Según el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación en unos de los últimos estudios sobre alimentación se concluyó que en los hogares españoles se tiraron en 2018, 1.339 millones de kg de alimentos y bebida, un 8,9% más que el año anterior (del total, 1.127 millones de kg/l. corresponden a productos sin utilizar y 212 millones a alimentos cocinados).
Un dato preocupante ¿no creéis? Y es que aunque como os he contado en otras ocasiones la concienciación sobre el reciclaje, la reutilización de productos… va en aumento no parece que nos importe tanto el desperdicio de comida.
Acabar con el despilfarro es tan sencillo cómo hacer una buena compra, ahí está la clave. Comprar solo lo que necesitamos, aunque a muchos no les gusta, bajar al súper cada 2/3 días hace que cocines muy al día, así evitamos que la comida se pierda o caduque en la nevera. Y por supuesto, aprovechar las sobras del día anterior, yo lo hago y ¿vosotros?
Fuente: La energia de Luzia