Ya no será posible “disfrutar” del aerogenerador tal y como lo conocemos. Ha aparecido en el mercado un innovador diseño que alarga la vida. Sorprende incluso más que el aerogenerador más grande del mundo. La energía eólica ya se ha ganado un lugar privilegiado entre las fuentes de energía renovable debido a su prometedor potencial frente a los contaminantes combustibles fósiles. Contribuye a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y mitiga los efectos del cambio climático.
No obstante, pese a sus amplias ventajas, existe un tema que preocupa tanto a ecologistas como a defensores de la biodiversidad y es que las turbinas eólicas inciden negativamente en las poblaciones de aves y murciélagos. Esta realidad deriva en una necesidad urgente de ofrecer soluciones tan prácticas como efectivas.
Según un estudio del Servicio de Pesca y Fauna Silvestre de Estados Unidos, estas infraestructuras dan lugar a la muerte de entre 140.000 y 500.000 aves al año. Aunque las pérdidas de vida causadas por turbinas eólicas son menores en comparación con otras amenazas, los números siguen siendo alarmantes. El desafío de la energía eólica radica en encontrar un equilibrio entre otorgar energía y salvaguardar la integridad de las especies amenazadas.
Pintar el aerogenerador de negro: la insólita solución que puede salvar miles de vidas
Los murciélagos corren un riesgo todavía mayor que las aves. Casi un millón de murciélagos perecen cada año en América del Norte a causa de las turbinas eólicas y decenas de miles en Australia, informa Ecoinventos. Este grave problema encontraría solución con la sencilla acción de pintar los aerogeneradores de negro en lugar del tradicional banco.
Esta simple modificación ha arrojado resultados impactantes en un estudio de Noruega publicado en Online Library Wiley, firmado por Roel May, Torgeir Nygård, Ulla Falkdalen, Jens Åström, Øyvind Hamre y Bård G. Stokke, bajo el nombre “Píntalo de negro: Eficacia de una mayor visibilidad de las palas del rotor de las turbinas eólicas para reducir las muertes de aves”. Se demostró que pintando una aspa de negro, la pérdida de aves bajó un 72% anual en las turbinas observadas.
El cambio estético de color genera que las turbinas sean más visibles para las aves, disminuyendo el riesgo de colisión. Además, se están efectuando investigaciones para estudiar las altitudes de vuelo de las aves marinas y migratorias, de manera que las turbinas puedan instalarse a alturas menos peligrosas para ellas. También están empleándose métodos de seguimiento de los patrones migratorios para detener temporalmente las turbinas cuando se aproximan grandes grupos de aves.
Esta perspectiva, aunque algo más completa, brinda una solución óptima para evitar fallecimientos de animales durante las migraciones. En el caso de los murciélagos, la solución contempla ajustar el funcionamiento de las turbinas de acuerdo a las condiciones climática. Una solución eficiente es la activación de turbinas solo cuando existen vientos fuertes.
El aerogenerador tradicional queda a un lado: así pretenden salvar a los murciélagos y aves
Los murciélagos de menores dimensiones no pueden volar con vientos superiores a determinados niveles, lo que quiere decir que el riego de colisión baja de manera drásticas cuando las turbinas se activan solo cuando el viento es lo suficientemente fuerte para mantener a estos murciélagos alejados del peligro.
Por otra parte, un estudio publicado en ESA titulado “La alteración de la velocidad de la turbina reduce la mortalidad de los murciélagos en las instalaciones de energía eólica” y firmado por Edward B Arnett, Manuela MP Huso, Michael R. Schirmacher y John P Hayes expuso que aumentar la velocidad de corte mínima de 3,5 metros por segundo a 6,5 m/s baja de manera significativa la mortalidad de murciélagos.
Ante la amenaza que supone el aerogenerador convencional para las aves y murciélagos, este dispositivo podría cambiar para siempre. Un hito significativo para el sector que se compara con este otro aerogenerador sin aspas ni movimiento.