Un establecimiento de la marca Carrefour en Sevilla ha sido sancionado tras una alerta por una intoxicación alimentaria que tuvo su origen en un atún descongelado que estaba expuesto a la venta en la zona de pescadería sin estar cubierto de hielo como debe ser.
Es más, durante la inspección que se hizo y con el que el Ayuntamiento hispalense abrió el expediente sancionador se vio cómo el portaprecios de ese pescado no tenía la información obligatoria a la que debe de tener acceso el cliente.
En el atún que comieron las dos personas intoxicadas, la inspección constató por medio de un análisis que los dos filetes tenían un valor de histamina que superaba el límite legal establecido.
Atún: el principio de una intoxicación alimentaria y una sanción a un Carrefour de Sevilla
El Ayuntamiento de Sevilla abre expediente sancionador a un Carrefour tras una denuncia de FACUA originada en una intoxicación alimentaria. La inspección constató que el atún descongelado expuesto a la venta no estaba cubierto por hielo y que en los portaprecios no aparecía la información obligatoria a la que debe de tener acceso el cliente.
Tras la denuncia de FACUA Sevilla a raíz de una toxiinfección alimentaria de dos de sus socios, el Servicio de Consumo del Ayuntamiento de Sevilla ha propuesto abrir expediente sancionador al Carrefour Express ubicado en la avenida José Laguillo de la capital hispalense tras inspeccionar y detectar irregularidades en la manera de conservar el atún descongelado expuesto a la venta al público.
La asociación remitió el viernes 13 de junio un aviso al Servicio de Salud Pública de la Junta de Andalucía informando de una posible intoxicación alimentaria a consecuencia del consumo de un atún que había sido adquirido en la sección de pescadería de dicho establecimiento.
Como ya ocurrió a principios de año con la toxiinfección alimentaria por montaditos de pringá en la taberna La Sacristía de Córdoba, pasó todo el fin de semana sin que la administración notificase a la asociación un acuse de recibo de la recepción del mismo pese a la gravedad del asunto.
Es más, en el correo electrónico habilitado para tal efecto por la Consejería de Salud y Consumo como canal de consultas y comunicación de alertas sanitarias se recibe una respuesta automática donde se indica que «el mensaje que ha enviado no pudo ser entregado a todos sus destinatarios. Se trata de un error permanente».
Tras contactar finalmente por vía telefónica, la Junta dio traslado del aviso de FACUA Sevilla al Servicio de Consumo del Ayuntamiento de Sevilla. El 17 de junio, un inspector se personó en el establecimiento para investigar los hechos. En el momento de la inspección, ya no había existencias del lote atún que habían adquirido días antes los socios afectados por la intoxicación alimentaria. En cualquier caso, se procede a tomar una muestra del atún que se encontraba en el mostrador en ese momento. El análisis de la muestra realizado en el Laboratorio Municipal de Sevilla arrojó resultado favorable conforme a la legislación vigente.
Histamina en el atún
El 20 de junio, el inspector se personó también en el domicilio de estos socios para tomar una muestra del atún que habían consumido, ya que mantenían dos filetes en el congelador. El análisis realizado sobre esta muestra arrojó un valor de histamina que superaba el límite legal establecido.
Personal del Servicio de Consumo del Ayuntamiento de Sevilla volvió al Carrefour Express de José Laguillo para informar sobre los resultados de la muestra que tomaron el 17 de junio en el establecimiento. Tras analizar el sistema de lectura y grabación de la cámara de refrigeración, la inspección constató que existían incidencias en las temperaturas registradas esa semana, por lo que se le requirió al personal del establecimiento que adoptasen medidas para garantizar las temperaturas de conservación de los productos de pesca.
La ficha de Buenas Prácticas del Manual de Calidad que debe seguir el personal de pescadería deja claro que «el atún es un pescado muy sensible a la cadena de frío» e indica que las piezas de este pescado se deben mantener cubiertas con hielo y mantenerlas a la venta un máximo de 24 horas desde la apertura del envase. Asimismo, señala que se deben colocar portaprecios con la información obligatoria, incluida la correspondiente a «producto descongelado, no volver a congelar».
Según los datos de trazabilidad aportados por Carrefour Express, el producto analizado era lomo de atún de aleta amarilla descongelado marinado con agua añadida. Es decir, se trataba de un pescado que ya había sido congelado anteriormente, por lo que el establecimiento tenía la obligación de informar al consumidor de que no se podía volver a congelar. Durante la inspección realizada, el atún que se encontraba en ese momento a la venta ni estaba cubierto por hielo, ni era visible la información obligatoria a la que debe de tener acceso el cliente donde indicase que era un alimento que ha había estado congelado.
Por ello, el Servicio de Salud Pública de la Junta de Andalucía ha informado a FACUA Sevilla de que el Servicio de Consumo del Ayuntamiento de Sevilla va a incoar un expediente sancionador contra el Carrefour Express de la avenida José Laguillo por dichas irregularidades. Asimismo, le ha requerido la adopción de medidas correctoras y la acreditación de que ha impartido formación específica al personal de pescadería y sobre sistemas de autocontrol al personal responsable del establecimiento.
FACUA Sevilla insta a los establecimientos minoristas y cadenas de distribución a extremar las precauciones a la hora de conservar y tratar alimentos para prevenir posibles intoxicaciones. Asimismo, les pide que cumplan rigurosamente con las medidas de autocontrol para garantizar la seguridad alimentaria y los planes de higiene con el fin de minimizar riesgos y cumplir con la normativa vigente. ECOticias.com