Proyecciones climáticas: subestiman las erupciones volcánicas. Si bien este efecto está lejos de ser suficiente para compensar los efectos del calentamiento global causado por la actividad humana. Una investigación de la Universidad de Cambridge, sostiene que las erupciones de pequeña magnitud son responsables de hasta la mitad de todos los gases de azufre emitidos en la atmósfera superior.
Impredecibles pero reales
Dónde y cuándo entra en erupción un volcán no es algo que los humanos puedan controlar, pero no hay duda que estos juegan un papel importante en el sistema climático global. Cuando los volcanes erupcionan, pueden arrojar gases de azufre a la atmósfera superior. Lo que forma partículas diminutas llamadas aerosoles que reflejan la luz solar y la envian de regreso al espacio.
Cuando hay erupciones muy grandes, como la del Monte Pinatubo en 1991, el volumen de aerosoles volcánicos es tan grande que por sí solo provoca que las temperaturas globales bajen. Sin embargo, estas grandes erupciones solo ocurren unas pocas veces por siglo. La mayoría de estos fenómenos son de pequeña magnitud y ocurren cada uno o dos años.
«En comparación con los gases de efecto invernadero emitidos por la actividad humana, la influencia que los volcanes tienen en el clima global es relativamente menor. Pero es importante que los incluyamos en los modelos climáticos para evaluar con precisión los cambios de temperatura en el futuro». Esto lo dijo la primera autora, May Chim, candidata al doctorado en el Departamento de Química de Yusuf Hamied. Proyecciones climáticas: subestiman las erupciones volcánicas.
Se ignora las erupciones pequeñas
Las proyecciones climáticas estándar, como las que se plantean en el Sexto Informe de Evaluación del Panel Intergubernamental sobre el Cambio Climático (IPCC), asumen que la actividad volcánica explosiva entre 2015 y 2100 estará al mismo nivel que el período 1850-2014. Y pasan por alto los efectos de las erupciones de pequeña magnitud.
“Estas proyecciones se basan principalmente en cómo afectan a los núcleos de hielo. De esta forma se estima cómo los volcanes podrían afectar el clima. Pero las erupciones menores (y más frecuentes) son demasiado pequeñas para ser detectadas en los registros de núcleos de hielo”, dijo Chim. “Queríamos hacer un mejor uso de los datos satelitales para llenar este vacío. Y tomar en cuenta las erupciones de todas las magnitudes”.
Usando los últimos registros satelitales y de núcleos de hielo, Chim y sus colegas de la Universidad de Exeter, el Centro Aeroespacial Alemán (DLR), la Universidad Ludwig-Maximilians de Munich, la Universidad de Durham y la Oficina Meteorológica del Reino Unido generaron 1000 escenarios diferentes de la futura actividad volcánica. Proyecciones climáticas: subestiman las erupciones volcánicas.
Forzamiento volcánico subestimado
Seleccionaron escenarios que representan niveles bajos, medianos y altos de actividad volcánica. Y luego realizaron simulaciones climáticas utilizando el Modelo del Sistema Terrestre del Reino Unido.
Sus simulaciones muestran que los impactos de las erupciones volcánicas en el clima, incluida la temperatura global de la superficie, el nivel del mar y la extensión del hielo marino, se subestiman. Porque las proyecciones climáticas actuales ignoran en gran medida el nivel futuro plausible de actividad volcánica.
Para el escenario futuro mediano, encontraron que el efecto de los volcanes en la atmósfera, conocido como forzamiento volcánico, se subestima en las proyecciones climáticas hasta en un 50%. Debido en gran parte al efecto de erupciones de pequeña magnitud.
«Descubrimos que no solo se subestima el forzamiento volcánico, sino que las erupciones de pequeña magnitud son en realidad responsables de hasta la mitad del forzamiento volcánico», dijo Chim. “Es posible que estas erupciones de pequeña magnitud no tengan un efecto medible individualmente, pero colectivamente, su efecto es significativo. Proyecciones climáticas: subestiman las erupciones volcánicas.
No compensa el CO₂ antropogénico
«Me sorprendió ver cuán importantes son estas erupciones de pequeña magnitud: sabíamos que tenían un efecto, pero no sabíamos que era tan grande». Aunque el efecto de enfriamiento de los volcanes se subestima en las proyecciones climáticas, los investigadores enfatizan que no se compara con las emisiones de carbono generadas por los humanos.
“Los aerosoles volcánicos en la atmósfera superior generalmente permanecen en la atmósfera durante uno o dos años, mientras que el dióxido de carbono permanece en la atmósfera durante mucho, mucho más tiempo”, dijo Chim.
“Incluso si tuviéramos un período de actividad volcánica extraordinariamente alta, nuestras simulaciones muestran que no sería suficiente para detener el calentamiento global. Es como una nube pasajera en un día caluroso y soleado: el efecto refrescante es solo temporal”.
Los investigadores dicen que tener en cuenta completamente el efecto de los volcanes puede ayudar a que las proyecciones climáticas sean más sólidas. Ahora están utilizando sus simulaciones para investigar si la actividad volcánica futura podría amenazar la recuperación del agujero de ozono antártico. Y a su vez, mantener un nivel relativamente alto de radiación ultravioleta dañina en la superficie de la Tierra.
Referencia: la investigación fue apoyada en parte por la Fundación Croucher y The Cambridge Commonwealth, European & International Trust, la Unión Europea y el Consejo de Investigación del Medio Ambiente Natural (NERC) Y por Investigación e Innovación del Reino Unido (UKRI). Y se publicó en la revista Geophysical Research Letters.