Canadá se despide del diésel en el sector ferroviario tras presentar un proyecto con trenes de alta potencia abastecidos por partículas de agua. El proceso de descarbonización del transporte ferroviario responde a una estrategia integral enfocada a disminuir las emisiones de gases de efecto invernadero vinculadas a la actividad procesada por trenes y sistemas del sector.
Esta perspectiva se engloba dentro de los esfuerzos mundiales por aminorar el cambio climático, cumpliendo con los compromisos fijados en el Acuerdo de París. El objetivo principal es convertir el sector ferroviario en uno asociado a prácticas y tecnologías más sostenibles que acoten su huella ambiental.
Dicho proceso abarca la adopción de varias medidas tecnológicas, operativas y políticas. A nivel tecnológico, se pretende una transición hacia métodos de propulsión eléctrica y el empleo de fuentes de energía renovables para la producción eléctrica. Además, ya se están fabricando trenes de hidrógeno y trenes híbridos.
Canadá apuesta por los trenes movidos por partículas de agua
Bajo este marco, una empresa ferroviaria canadiense ha sacado a la luz la primera locomotora de hidrógeno de alta potencia en servicio regular en la Columbia Británica. CPKC ha sentado un precedente en el transporte ferroviario al ingresar al mercado la primera locomotora de hidrógeno de alta potencia en servicio regular.
La CP1201 ya está trabajando en rutas de carga pesada en Columbia Británica, moviendo carbón para Elk Valley Resources. Este proyecto evidencia la viabilidad del hidrógeno como fuente de energía en este campo y permite realizar un análisis sobre su operatividad en escenarios reales.
Dicha pieza se encuentra equipada con un tender de hidrógeno elaborado por HGmotive, una adaptación de un diseño previo para gas natural licuado (GNL) de 2019.
Este progreso facilita la transición de las locomotoras hacia el hidrógeno y abre la puerta hacia futuros modelos de esta categoría. El éxito que pueda alcanzar este sistema es crucial para adoptar masivamente locomotoras de hidrógeno en la industria del ferrocarril. El pasado 6 de marzo, CPKC consiguió la primera recarga de hidrógeno en una estación fija fuera de Alberta.
Así, marcó un antes y un después para el sector. Por otra parte, Asia está haciendo la propio con la presentación del tren más poderoso del mundo.
Los trenes cambian para siempre después de la invención expuesta por Canadá
La estación y sistema de abastecimiento exhibidos ante el mundo se rigen por las severas regulaciones de Transport Canada, la Asociación de Ferrocarriles Americanos (AAR), la Administración Federal de Ferrocarriles de EE.UU. (FRA) y el Departamento de Transporte de EE.UU. (DoT).
Adicionalmente, HGmotive ya está confeccionado una pieza de tender con mayor capacidad, que permitirá extender la autonomía de las locomotoras movidas por hidrógeno. Con sede en Calgary, Canadá, CPKC se alza como el único ferrocarril transnacional de línea única que une Canadá, Estados Unidos y México, con un acceso estratégico a los puertos más importantes de América del Norte.
Canadá cambia el mundo con su apuesta por el hidrógeno: los trenes no volverán a ser iguales
La elaboración de locomotoras de hidrógeno supone un avance considerable en la disminución de emisiones de carbono en el sector ferroviario. Al descartar el empleo de diésel y aprovechar fuentes de energía limpia, el hidrógeno contribuye de manera significativa a la descarbonización del transporte de carga.
Asimismo, la posibilidad de adaptar tecnologías existentes, como los tenders de GNL, hace más fácil la posibilidad de una transición más rápida y menos costosa hacia un tipo de ferrocarril sostenible. Si esta tecnología procedente de Canadá llegara a implementarse a gran escala podría bajar de manera drástica la huella ambiental y servir como ejemplo para otras industrias.
Gracias a Canadá, ahora los trenes de alta potencia podrían alimentarse solo de partículas de agua. Cabe destacar que vinculamos las partículas de agua con hidrógeno porque el único subproducto derivado de los motores de hidrógeno es agua. Mientras esto sucede en Canadá, España ya está a la espera de Hympulso, su primer tren de hidrógeno.