Tesla vuelve a estar en el ojo del huracán tras recibir la peor acusación. La presencia política de Elon Musk en su puesto del Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE) de Estados Unidos, sumada a las polémicas que rodean a la administración de Donald Trump, actual presidente de Estados Unidos, han llevado a Tesla a una situación complicada. Concesionarios y coches particulares Tesla están siendo vandalizados en todo el mundo.
Un contexto al que se le agrega la feroz competencia de compañías chinas del sector. Con todo, Tesla enfrenta una severa caída en sus acciones, parálisis en su cadena de suministro y una desconfianza cada vez mayor entre sus inversores y consumidores.
La crisis de la compañía de coches eléctricos quedó de manifiesto el pasado 2 de abril, cuando la marca de Elon Musk registró una pérdida del 13% en las ventas de sus vehículos durante el primer trimestre de 2025 comparando con el mismo periodo de 2024.
Según su informe, Tesla generó 362 615 coches eléctricos en los primeros tres meses de 2025. De ese número, 345 454 corresponden al Model 3 y Model Y. 17 161 de esas piezas son Model S, Model X o Cybertruck.
Aunque el dato que realmente preocupa a Tesla es la cifra de entregas, que durante el primer trimestre de este año fue de 336 681 unidades, una caída del 13% respecto al mismo lapso de tiempo en 2024 (386 810).
Tesla es acusada de manipular los cuentakilómetros de sus vehículos
Tras la polémica generada por el rechazo de Tesla a sus propios Cybertrucks, la compañía se enfrenta a otra devastadora situación. La marca de vehículos estadounidense está bajo sospecha de manipular el kilometraje mostrado en sus coches.
Según informa TheStreet, así lo han manifestado sus clientes, que se han unido para interponer una demanda colectiva en California, Estados Unidos. Varios conductores estadounidenses aseguran que el número de kilómetros recorridos que marca el odómetro de su coche Tesla registra un número bastante por encima del real.
Tesla habría determinado, presuntamente, un sistema de cálculo que sobreestima la distancia transitada por sus coches. Pero ¿por qué la compañía de Elon Musk haría algo así? Lo más común en marcas que incurren en este tipo de prácticas es que resten kilómetros a los vehículos para alzar su valor de venta.
¿Por qué Tesla mentiría en el kilometraje de sus vehículos?
Pero Tesla estaría haciendo la práctica contraria. Su motivo sería hacer que la garantía de sus vehículos culmine lo antes posible. En líneas generales, el cuentakilómetros de un automóvil funciona a través de un sensor ubicado en el diferencial o las ruedas.
Este dispositivo es el encargado de transformar las rotaciones en kilómetros recorridos. Una metodología que ha permanecido de forma constante, mediante sistemas mecánicos o eléctricos. Por ejemplo, la estimación es que alrededor de 1050 rotaciones son el equivalente a un kilómetro.
No obstante, la firma estadounidense habría utilizado un método distinto para medir el kilometraje de sus vehículos, recurriendo a algoritmos que estudian el consumo energético y patrones del comportamiento del conductor/a para analizar la distancia recorrida.
¿Qué dicen los demandantes sobre Tesla?
Según la demanda de los propietarios de vehículos Tesla, “utiliza un sistema de cuentakilómetros basado en algoritmos predictivos, métricas de consumo de energía y factores del comportamiento del conductor, que distorsionan y manipulan el kilometraje real de sus vehículos”.
Para poner en contexto, esto se traduce en que un automóvil podría registrar 100 km transitados en el cuentakilómetros cuando el GPS solo reporta 90 km. Esta situación vuelve a poner a Tesla en el ojo del huracán, especialmente después de que Elon Musk reconociera el gran error de la compañía.