Alrededor del 12 por ciento de los estadounidenses sufren de algún tipo de pérdida auditiva, según el Centro de Audición y Comunicación, una organización que ofrece pruebas de audición y terapia del habla. Sin embargo, ayudar a esas personas resulta mucho más complicado que simplemente aumentar el volumen en un dispositivo, puesto que cada persona tiene un tipo de pérdida auditiva distinta, explica Barbara Kelly, directora adjunta de la Asociación de Pérdida de Audición de Estados Unidos. «Cada pérdida de audición tiene una huella digital diferente», señala.
Una nueva aplicación de teléfono inteligente llamada ACEHearing pretende hacer frente a este problema a través de una sencilla prueba que diagnostica la forma específica de pérdida auditiva de un usuario y personaliza la salida de un dispositivo móvil para que se adapte mejor a la capacidad de escucha del oyente. Andrew van Hasselt, presidente del departamento del oído, nariz y garganta de la Universidad China de Hong Kong, además de uno de los principales desarrolladores de ACEHearing, señala que la aplicación es solo un prototipo de prueba de concepto relacionada con un intento mayor por agregar la funcionalidad de forma estándar en teléfonos y otros aparatos que produzcan sonido.
Durante la prueba, realizada con auriculares, el dispositivo reprodujo sonidos a través de un rango de frecuencias y preguntó al usuario si los podía oír. El software ajusta la salida de audio del dispositivo mediante la amplificación de las frecuencias más problemáticas. Esto es importante, ya que un usuario de teléfono inteligente que tenga problemas para discernir el habla porque no puede escuchar ciertas frecuencias no conseguiría nada con simplemente subir el volumen.
Los ensayos clínicos han demostrado que la prueba que ACEHearing administra es equivalente a las administradas por un audiólogo tradicional, explica Paul Lee, director de Ximplar, una compañía de software con sede en Hong Kong que trabajó con la Universidad China de Hong Kong para desarrollar la aplicación.
«A menudo pasan de cinco a siete años antes de que una persona que se entera de que tiene pérdida de audición hace algo al respecto», afirma Kelly. El equipo de ACEHearing tiene la esperanza de evitar este retraso en el tratamiento, proporcionando una solución fácil de usar.
Brian Fligor, director de audiología de diagnóstico en el Hospital Infantil de Boston, no está convencido de que ACEHearing sea beneficiosa para aquellos con pérdida auditiva. Hace hincapié en la necesidad de que cualquier persona con pérdida auditiva visite a un audiólogo y se haga un examen completo. Fligor señala, sin embargo, que la aplicación podría mejorar la experiencia auditiva de forma más general: «Creo que hay beneficios en todo aquello que mejore la experiencia musical de cualquier persona. Me considero un audiófilo».
El equipo de ACEHearing está en conversaciones con varios fabricantes de teléfonos inteligentes para incorporar sus productos en los nuevos teléfonos.