“La forma en que Canadá financia la innovación en tecnologías verdes fue considerada como un éxito a destacar, entre las muchas fallas encontradas esta semana, tras el balance realizado por las auditorías a la forma como el gobierno federal está respondiendo a la problemática planteada por el Cambio Climático.”
No todo está mal
Julie Gelfand la comisionada del Medio Ambiente y Desarrollo Sostenible expresó su preocupación con estas palabras: “el país parece haber olvidado todos los objetivos de reducción, que se plantearon desde 1992 y no parece probable que consiga los que se propusieron para el 2020”.
A la vista de los resultados de la auditoria llevada a cabo por el Instituto Pembina y anunciados por el Auditor General de Canadá, Gelfand considera que: “en general, el gobierno federal no está preparado para contrarrestar o adaptarse, a los impactos de un clima cambiante”.
Por otra parte, la forma en la que el gobierno canadiense ha gestionado los tres programas de fomento y desarrollo de las tecnologías verdes: la Iniciativa Tecnológica ecoENERGY, el Fondo de Energía Limpia y el Fondo Tecnológico SD, se considera muy positiva
Los resultados de la auditoria revelan que los organismos de control de tecnologías verdes: Sustainable Development Technology Canadá y Natural Resources Canadá, siguieron procesos rigurosos y objetivos a la hora de financiar, controlar, evaluar y llevar a cabo, dichos programas.
Esto significa que, si bien el gobierno ha invertido ingentes cantidades de dinero en este tipo de tecnologías verdes, los proyectos financiados cumplían con los controles rigurosos y dieron sus frutos, gracias a que las instituciones federales que estuvieron involucradas, fueron diligentes a la hora de evaluar y aprobar los resultados.
Y lo que falta
Por su parte, el equipo de la Oficina del Auditor General destacó que aún existen áreas en las que se puede mejorar, destacando que los canadienses tienen que saber cuál es el progreso que se ha hecho con estas inversiones en cuanto a combatir el Cambio Climático y cuál es la tasa de reducción real, de la emisión de gases de efecto invernadero.
La auditoría para la Financiación de las Tecnologías de Energía Limpia consideró que, el desarrollo de nuevas tecnologías verdes resulta clave para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, incluidos aquellos proyectos con los que se pretende capturar carbono.
Las instalaciones para la recuperación del carbono están diseñadas para recoger el dióxido de carbono y depositarlos en el subsuelo, mientras que las de captura están planificando emplear el CO2, en diversas industrias.
En este ámbito, el principal objetivo es reducir los gases de efecto invernadero, pero, manteniendo al mismo tiempo el ritmo de trabajo de estas plantas industriales, como son centrales eléctricas que emplean carbón, industrias químicas y de producción de fertilizantes, fabricación de acero y cemento y/o petroleras.
Los proyectos de captura, secuestro y almacenamiento de carbono suelen ser bastante polémicos, en todas partes del mundo y Canadá no es una excepción. Pero si bien se considera que necesita más investigación y aplicación de nuevas tecnologías verdes, ya funciona a en el país, la primera la primera unidad para la captura de carbono industrial del mundo.