El Pacto de Estado contra el cambio climático afronta una nueva etapa marcada por la urgencia de responder a dos desafíos cada vez más evidentes: el aumento del calor extremo y la expansión de la desinformación climática. Esta evolución del acuerdo refleja una mayor madurez institucional y social ante un fenómeno que ya no es una amenaza futura, sino una realidad cotidiana con impactos directos en la salud, la economía y la cohesión social.
Las olas de calor, más frecuentes, intensas y prolongadas, se han convertido en uno de los principales riesgos climáticos. El Pacto incorpora ahora medidas específicas de adaptación, como planes de prevención sanitaria, refuerzo de infraestructuras urbanas resilientes, protección de colectivos vulnerables y mejora de los sistemas de alerta temprana.
Combatir el calor extremo exige coordinación entre administraciones, ciencia y servicios públicos, y el nuevo enfoque del Pacto avanza en esa dirección.
Pacto de Estado climático: cómo funciona en su nueva versión
La nueva propuesta de pacto de Estado frente a la emergencia climática, presentada este miércoles en Madrid, profundiza en aspectos como el conocimiento científico, la biodiversidad, las olas de calor y la desinformación climática, ha explicado la vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Sara Aagesen.
El Pacto de Estado contra el cambio climático afronta una nueva etapa marcada por la urgencia de responder a dos desafíos cada vez más evidentes: el aumento del calor extremo y la expansión de la desinformación climática.
El nuevo texto del pacto se ha enriquecido, desde su presentación en septiembre, con cerca de 4.000 aportaciones de entidades e individuos, una demostración de que «España entiende la magnitud del desafío» y de que la sociedad «demanda su participación» en la gestión del problema, ha dicho la ministra en un acto en el Círculo de Bellas Artes.
El reforzamiento del conocimiento sobre el cambio climático y la creación de un panel científico sobre este asunto; un nuevo eje sobre biodiversidad; medidas adicionales sobre los sistemas costero y marinos; una amplificación del eje sobre las olas de calor, que habla más de salud integral; una gobernanza distinta para medir el progreso de las medidas, y un eje contra la desinformación climática son algunas de las novedades que ha detallado Aagesen.
Sobre la desinformación, la ministra ha enfatizado en que «es un reto que debilita a las instituciones, ataca a los científicos y dificulta la respuesta».
La protección de los hogares más vulnerables, un plan de empleo verde rural y la promoción de simulacros periódicos son otras incorporaciones a la propuesta de pacto.
El pacto y los nuevos ejes: ciencia, biodiversidad y salud climática
El texto original contaba con diez ejes básicos, que ahora son quince. El primer documento contemplaba la creación de una nueva agencia estatal de Protección Civil y de Emergencias, la dotación de más recursos permanentes por parte de todas las administraciones públicas, el reforzamiento del mundo rural y la instauración de una cultura cívica de protección, entre otras medidas.
«Actuar es una acto de responsabilidad, un acto de protección de las personas y el patrimonio», ha dicho Aagesen. «Un país que se anticipa es más fuerte», ha agregado.
El ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, ha asegurado que «los profesionales del campo y del mar están para adaptarse y mitigar este nuevo escenario» de cambio , por lo que «escucharles y apoyarles es un elemento fundamental».
La protección de los hogares más vulnerables, un plan de empleo verde rural y la promoción de simulacros periódicos son otras incorporaciones a la propuesta de pacto.
Planas ha mencionado las aportaciones de su ministerio a la nueva propuesta de pacto, entre ellas el papel de la ganadería extensiva y el impulso de las razas autóctonas, el uso eficiente del agua y de la energía como «un compromiso ineludible», la importancia de los seguro agrarios y el reaseguro a nivel europeo, la agricultura regenerativa y la protección de las comunidades costeras.
«Queremos que lo que es una amenaza se convierta en un objetivo de movilización para la sociedad«, ha indicado Planas.
El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha apuntado que ante el cambio climático hay que redefinir los ejes de actuación y ampliar la capacidad de respuesta y los recursos disponibles. «Debemos diseñar una estrategia anticipatoria integral con la que hacer frente a la emergencia climática», ha dicho Marlaska. «El objetivo es salvar vidas, la sociedad nos lo reclama».
Las 3.985 propuestas para enriquecer el pacto recibidas en tres meses se refieren mayoritariamente a la resiliencia hídrica, la transición ecológica, la cultura de prevención, el ámbito forestal y la reducción del riesgo de desastres. Seguir leyendo en ECOticias.com



















