Las exuberantes plantas que Joan Castellà exhibía ayer orgulloso en la entrada de un enorme invernadero en Amposta (Montsià) auguran una primavera fructífera. Es esta época del año explota el grueso de su producción hortofrutícola ecológica, más de 30 variedades de verdura y algunas frutas que ofrece a más de 300 clientes fieles. Pero más que el color, le importa el gusto. «El sabor distingue a los productos ecológicos, y se logra intentando que la planta absorba todos los minerales y vitaminas que reclama, con el tiempo que necesite, y por lo tanto sin añadirle abonos nitrogenados que conseguirían un crecimiento más rápido pero un fruto con mucha más agua y menos esencia», afirma este veterano agricultor que optó hace 17 años por el cultivo ecológico.
Explica Castellà que un producto ecológico es más caro en el mercado por una cuestión básica: «Defendemos un precio justo para el agricultor, un precio que cubra gastos y nos permita vivir, algo que la agricultura convencional no está consiguiendo lamentablemente», señala. Y argumenta con datos los gastos que debe cubrir el precio final. «La química permite utilizar menos mano de obra, ya que nosotros tenemos que hacer más trabajo manual, por ejemplo para eliminar las malas hierbas», comenta. Y sigue: «Yo nunca he obtenido más de nueve kilos de tomate en un metro cuadrado de terreno, cuando con química se pueden cosechar hasta 24 kilos en ese mismo espacio».
Y tampoco es que ahorre productos para el cuidado de las plantas: «Uso extracto de ajo como repelente, otros extractos de plantas como insecticidas, y minerales como el cuarzo como fungicidas, que también valen dinero», advierte Castellà. Eso sí, como el mismo distribuye sus productos con la ayuda de internet, el precio final no carga el beneficio de ningún intermediario. «En algunas épocas del año el precio en el mercado no es tan diferente –explica–, y estaría bien reflexionar sobre lo que obtenemos a cambio, que es un alimento con más gusto y nutrientes, y con menos contaminantes».
Vida Sana / A.Luís-Elperiodico.com




















